En Tolú, el municipio turístico más antiguo del departamento de Sucre, la ciudadanía alista el proceso para revocarle el mandato al alcalde, el sacerdote José de Jesús Chadid Anachury.
Para este martes 12 de enero está previsto el acto de inscripción del comité promotor que lo integran representantes de los hoteleros, de los comerciantes informales del turismo, del sector agropecuario y rural, del sindicato de la Alcaldía de Tolú, comercio en general, indígenas y profesionales del municipio.
Franco Uribe Baena, que es miembro además del Movimiento Tolú Cívico, es el vocero del comité que promueve la revocatoria y quien advirtió que este no es un acto caprichoso sino un pronunciamiento público del pueblo ante los hechos que han venido ocurriendo desde que Chadid --que se hizo elegir con el eslogan ‘Tolú tiene cura’-- asumió el mandato.
Más allá del incumplimiento de un plan de desarrollo del que muchos en Tolú alegan que es ilegal porque algunos de los que mencionan allí como partícipes de su proceso de conformación dicen no haber hecho parte de este, los toludeños aducen que entre las razones que hay para revocarle el mandato a su alcalde están la desidia en la que se encuentra el pueblo, la ola de inseguridad que contempla homicidios, atracos y consumo y venta de estupefacientes, mentiras e irregularidades en las contrataciones, entre otros.
Melquiades Atencia, miembro del Comité Tolú Cívico, reprocha que el alcalde tenga contratadas en su administración a 80 personas que no son de Tolú, 'eso es desconocer el potencial que hay en el pueblo, eso es quitarle la oportunidad laboral a 80 nativos y por ende que 80 familias de este pueblo no tengan una buena calidad de vida. Esta y muchas otras situaciones tienen insatisfechas a la comunidad y una de esas es que hay mucha corrupción y que aquí la pandemia por la Covid-19 no ha sido tratada de la mejor manera, por respuesta a un derecho de petición al Ministerio del Interior nos enteramos que no se mandaron los protocolos para aplicar aquí', dijo Atencia.
Franco Uribe celebra que con la nueva ley que regula la revocatoria del mandato habrá una audiencia pública en la que ellos podrán hacerle saber al alcalde los motivos de su inconformismo y este por primera vez hablará de frente al pueblo porque no lo ha hecho en sus meses de mandato.
'Este es un fenómeno nuevo en Tolú, aquí las nuevas generaciones, esas que eran niñas cuando los que sumieron al pueblo en el abandono estaban en el poder, ahora se han levantado', puntualizó Franco Uribe, quien considera que aunque el proceso de recolección de firmas no es fácil, ya hay muchos sectores de la sociedad que están cansados del abandono y las mentiras y le dicen sí a esta revocatoria.
