Los aires de porros y fandangos que suelen escucharse con más fuerza en esta época del año en Sincelejo donde se celebran las Fiestas del 20 de Enero que este año, por cuenta de la pandemia no están programadas, se han tomado las calles en las últimas semanas.
Seis venezolanos, tres de ellos músicos profesionales, conforman la agrupación Sabor Costeño que recorre barrios y calles céntricas con su música y a cambio reciben elogios y algo de dinero para suplir su permanencia en esta que es denominada la ciudad del encuentro
Ronald Mattos, el director de Sabor Costeño, dijo que desde hace tres años encontraron en la música su forma de vivir y mantener a los suyos lejos de la tierra natal.
'Llegamos hace tres años a Barranquilla y allá nos fue muy bien, nos conocían por toda la ciudad, pero ahora con los controles y las medidas porque hay muchos casos de coronavirus allá decidimos llegar a Sincelejo, la ciudad que una cliente nos sugirió y la verdad es que llegamos aquí desde el 15 de diciembre y nos ha ido muy bien. La gente elogia nuestro trabajo y nos han contratado mucho', dijo Mattos.
Por ejemplo 24 y 31 de diciembre trabajaron hasta la madrugada de los días siguientes porque los buscaron en los barrios para alegrar fiestas, 'pero lo hacemos con los protocolos de bioseguridad, no permitimos aglomeraciones porque eso afecta a los demás y a nosotros también', anota.
En la actualidad los seis integrantes de Sabor Costeño están radicados en una residencia en la que cada uno debe pagar diariamente 15 mil pesos y por la calle, donde se ganan la vida, compran los alimentos.
Lo que recaudan con sus toques les sirve para costear sus gastos diarios y para enviar a sus familias en Maracai y Caracas donde cinco de ellos tienen sus hijos. Quienes quieran contratar los servicios de Sabor Costeño pueden contactarlos a través del contacto 3008925080.
