Los empresarios y microempresarios de la llamada industria sin chimenea en el país y en especial en el Golfo de Morrosquillo, están de luto por el fallecimiento de su máximo dirigente, Héctor Conde Rangel, cuya salud se complicó por cuenta de la covid-19.
Su deceso se produjo la noche del miércoles en la Clínica General del Norte de la ciudad de Barranquilla donde completó 40 días internado luego de ser remitido desde un centro asistencial de Sincelejo a donde estuvo inicialmente recibiendo atención médica.
Uno de sus amigos contó que el dirigente gremial del sector turístico en la última semana no había respondido a los tratamientos médicos porque sus pulmones estaban muy afectados y eso fue lo que le produjo la muerte.
Héctor Conde era el director ejecutivo de la Asociación de Empresarios Turísticos del Golfo de Morrosquillo, Asetur-GM, ente del que fue socio fundador, al igual que lo hizo con la Confederación de la Industria Turística de Colombia (Confetur), donde era su vicepresidente, y además el gerente del Hotel Isla Palma.