En la tranquilidad de su casa del barrio Palito sector Plaza de Toros del municipio de San Onofre se produjo el deceso de Luis Rocha Pérez o ‘el Negro Rocha’ como popularmente lo conocían.
Tenía 106 años y durante 77 se dedicó al mundo del coleo y manteo de toros bravos en las corralejas de las sabanas de Sucre, Bolívar y Córdoba.
Su reconocimiento se lo dio la fuerza descomunal que tenía y que le permitió muchas veces tumbar toros en el redondel.