SINCELEJO. 'Ningún colegio de Sucre tienen las condiciones mínimas para sobrellevar una jornada única'. Con esta sentencia el presidente de la Asociación de Trabajadores de la Educación en Sucre (Ades), Edilson Arrieta Garay, mostró su desacuerdo al conocer, a través del Plan Departamental de Desarrollo, que el gobierno departamental tiene como propósito que el 30% de las instituciones educativas entren en la jornada a partir de este año. Recordó que el gobernador de Sucre, Édgar Martínez, se comprometió desde su campaña a no iniciar esta jornada hasta tanto los colegios no tuvieran los mínimos requisitos para que los estudiantes aumenten su jornada de 6 a 9 horas. Arrieta manifestó que mostrarán su inconformismo en el Concejo Departamental de Planeación y dijo que una vez tenga el primer acercamiento con el Martínez 'le haré el respectivo reclamo, para que cumpla lo pactado, porque lo que se acuerda es para cumplirlo'. En su visita a Sincelejo, el presidente de Federación Colombiana de Educadores (Fecode), Luis Grubert, sostuvo que no rechazan la jornada única, es más considera que es válida para salir de la crisis de calidad que tiene la educación, pero dijo que 'amerita unos requerimientos que hoy no están'. 'El tema de la alimentación escolar está presupuestada en $900, pero de estos hay coimas y hay quienes roban ese dinero y el Gobierno Nacional no asume con responsabilidad la vigilancia de que esos recursos lleguen a la mesa de los niños', dijo el dirigente de Fecode. Consideró que en Colombia se necesitarían 120 mil nuevos maestros y 3 mil nuevas instituciones para iniciar este plan. 'La jornada única sin las condiciones es una quimera y rechazamos la demagogia que se aplica para implementar una propuesta que es una necesidad para la educación', dijo Grubert.