El caso sucedió el pasado fin de semana, pero solo hasta este lunes la Guardia Indígena y las autoridades de Popayán confirmaron la muerte de los dos niños.
La Policía de Soledad vincula a los jóvenes de 16 y 13 años, muertos a bala, con bandas que hurtaban motos en ese municipio. Familiares aseguran que 'no eran delincuentes'.