Este tipo de artefacto es considerado como un elemento de guerra de uso privativo de las fuerzas militares.
EL HERALDO conoció el relato de uno de los uniformados atacados con explosivos.
Habitantes del barrio Lucero señalaron que las alarmas de los carros se encendieron y las paredes vibraron.
El uniformado, que está fuera de peligro, registra tres heridas por esquirlas de granada.
La víctima era un agente del CTI quien reaccionó con su arma de dotación cuando los antisociales lo abordaron.