Y es que el nuevo propietario de Twitter, ordenó este viernes el cierre de las oficinas de la compañía.
El nuevo dueño de la red social también está enviando mensajes de texto a empleados donde especifica si siguen o no trabajando para la compañía.
El empresario había anunciado un recorte de personal en un 10 %.
Los exempleados argumentan que fueron despedidos sin justa causa y las indemnizaciones que recibieron no son correctas.
Los empleados sindicalizados de la empresa exigen la reanudación de las operaciones en las minas Calenturitas y La Jagua, en el centro del Cesar.