La escritora mexicana sufría de parálisis cerebral tetrapléjica. El total de sus obras las escribió con el dedo gordo del pie izquierdo.
La escritora costeña conversó con EL HERALDO sobre el proceso que le permitió amar a su hijo tras confesarle su identidad sexual.
La mujer está siendo juzgada en un tribunal de Obregón, Estados Unidos.
La española alega que serían útiles en resolver conflictos. Puso de ejemplo a Marco Aurelio y su estoicismo.
Así lo expresó el escritor peruano Bryce Echenique. Su novela ‘Un mundo para Julius’, recibió un homenaje.