Fue encarcelado cuando le reclamó a su exjefe por el pago de sus servicios de albañil.
El hombre estaba preso por delitos sexuales contra menores desde el 2017. Lo encontraron sin vida en el patio dos.
El hombre, de 56 años, le habría dado un infarto. Había sido capturado tras una redada de la Fiscalía.
Tuvo miles de dólares y euros en sus manos, estuvo preso en cinco países, escribió un libro y dice que las drogas y el alcohol son una perdición.
El exjugador del Barcelona se abstuvo de dar declaraciones a la prensa pese al nutrido grupo de periodistas que lo esperaba en el terminal.