Presente en el mercado desde 2013, y con una concesión de 500 m2 en el mar Cantábrico, Crusoe Treasure planea vender este año 30.000 botellas de blanco y tinto, muchas más que las siete mil de 2017.
El restaurante comercializa alrededor de 2.000 pizzas mensuales, el sushi por unidades rodea la misma cifra, y alrededor de 20 cajas de vino por mes.
Franck Labeyrie, un viticultor del castillo de Lugey (apelación Graves), en el suroeste de Francia, quiere optimizar la conservación de sus vinos blancos y tintos.
Dentro tienen un Vin Jaune producido por el viticultor Anatoile Vercel (1725-1786) proveniente de una viña cultivada bajo Luis XV y vendimiada durante el reino de Luis XVI.
Los profesionales del sector vinícola que participan en ese proyecto opinan que el hecho de dejar las botellas bajo el agua permite 'sublimar los aromas y hacer aflorar aromas secundarios', según Vincent.