Desde que murió de Steve Jobs (2011) mucho se ha especulado sobre la posible llegada de un punto de quiebre o picada de Apple a falta de la mano orientadora de quien fuese el padre de la compañía de la manzana y uno de los principales promotores de la vertiginosa escalada de la tecnología mundial.
No obstante, las cifras habían negado tal teoría hasta el punto que sus sucesores se arriesgaron años siguientes a apostarle a nuevos terminales con detalles e innovaciones que han mantenido a esta gigante tecnológica en el más alto punto de referenciación de excelencia informática.
Fue así como nacieron el iphone 4s,5, 5C, 5S, 6, 6 Plus, 6S y 6S Plus, llegando casi que a duplicar el número de celulares lanzados al mercado en los últimos cuatro años -sin Steve-, en comparación con los lanzados desde el primer iPhone (2007) hasta el iphone 4 en 2010.
Sin embargo, este martes el mundo tecnológico conoció varias cifras que ponen en el ojo del huracán el crecimiento de Apple.
La empresa informó que solo vendió 74,77 millones de teléfonos iPhone durante su primer trimestre fiscal, que finalizó el 26 de diciembre, por debajo de las expectativas de los analistas, que esperaban ventas de 76,54 millones.
Las ventas de iPhones, que representan alrededor de dos terceras partes de los ingresos de Apple, aumentaron menos del 1 % frente al mismo periodo de 2014, el ritmo más lento desde el debut del iPhone en el año 2007. A esto se le suma que el valor de las acciones de la empresa cayó por debajo de US$100 por primera vez desde octubre de 2014.
La noticia se conoce a pocas horas de que empezaran a circular en internet fotografías del supuesto modelo del nuevo mini iPhone 5SE, que tendría solo 10 centímetros (cuatro pulgadas) y sería anunciado por Tim Cook el próximo mes de marzo.
Nuevo iPhone 5SE a la derecha de un iPhone 5S.
Expertos alrededor del mundo no dudaron en correr a redes sociales para comentar el desplome de las ventas de la compañía norteamericana y empezar a especular sobre el futuro de la industria móvil en el planeta tierra, llegando incluso a asegurar que el 2016 no será el año de la manzana, recordando que la Mac solo representa el 13% de las ganancias de la compañía frente a un 63% de los móviles y un porcentaje restante de otros productos que pasan casi desapercibidos.
Futuro inmediato. Apple prevé ingresos de entre 50.000 y 53.000 millones de dólares en el trimestre que finalizará en marzo, por debajo de los 55.470 millones que preveía el consenso del mercado. Unos ingresos de 51.500 millones de dólares representarían una caída del 11 % frente al mismo periodo de 2015, lo que a su vez supondría la peor contracción desde mediados de 2001.
La compañía adelantó que su margen de beneficios brutos, los ingresos una vez descontados los costos, fue de entre el 39 % y el 39,5 %, frente al 39,97 % que esperaban los analistas.
Por lo demás, el gigante tecnológico anunció que sus beneficios aumentaron un 1,9 % en el último trimestre de 2015, hasta los 18.360 millones de dólares, frente a los 18.020 millones del mismo periodo del año anterior. Una cifra que puede tener una dosis esperanzadora ante un panorama poco alentador para la herencia de Jobs.