Los avances tecnológicos han ayudado a que las personas tengan herramientas para hacer tareas desde su celular, que antes tenían que ejecutarlas trasladándose a un lugar.
Lea también: ‘Se cambiaron los papeles’ lo nuevo del cartagenero Mr. Antony
De interés: Fito Paez cancela concierto en Bogotá tras fracturarse 5 costillas
Lea: Jorge Colmenares aclaró cómo ha sido su relación con Melissa Martínez
Pero así como ha crecido esta ayuda, también tiene que acrecentarse la seguridad y tener mucho cuidado en lo que hacemos en las aplicaciones, mayormente en la de los bancos.
Cuando los usuarios se disponen a hacer transferencias bancarias deberán tener mucho cuidado con su dinero, pues tiene que ingresar el número de cuenta o número de teléfono correcto al cual pasará el dinero y así no genere pérdidas.
Lea: Aprenda a cocinar un delicioso pollo a la manzana con arroz y aguacate
Esta medida es mágica porque el dinero llega inmediatamente y se salva de largas filas, en los cajeros del banco o de centros comerciales. Las transferencias están sujetas a estrictos protocolos de protección.
El nombre completo, el número de identificación, el monto a transferir y el número de la cuenta, son cosas importantes para tener, que harán de la transacción una experiencia satisfactoria. Opcionalmente, le piden que ponga el motivo de la transferencia, algo así como una descripción, en este paso debe estar atento porque si falla, todo puede resultar mal.
De interés: Silvestre Dangond dedicó emotivo mensaje a su hijo mayor: “Es duro dejarte”
Hay varias palabras que no debe ponerlas en la descripción, ni jugando. El Servicio de Administración Tributaria (SAT) de México, describe cuáles son las palabras que debe evitar escribirlas en la descripción de la transferencia.
Los bancos pueden comunicarse con la persona que hizo la transacción y si la explicación no es convincente, requerirán pruebas que respalden la legitimidad de la transferencia.
Lea: 'Los Patojos' denuncian amenazas tras la muerte de su madre
En el peor de los casos los bancos pueden decidir cerrar la cuenta o restringir el acceso a ciertos servicios financieros para mitigar riesgos futuros.
