Compartir:

Concibió la idea de escribir una canción alegórica a la Navidad pocos años después de que tuvo uso de razón.

Las nostálgicas notas de La víspera de año nuevo, que en cada diciembre escuchaba en la voz de Guillermo Buitrago a través de las emisoras, los discos y casetes, estimularon su espíritu creador.

La víspera de año nuevo, estando la noche serena (bis)/ Mi familia quedó con duelo, yo gozándome a mi morena (bis)…

'Fue una canción reveladora para mí, pues gracias a esta supe de la existencia del compositor Tobías Enrique Pumarejo y le cogí el gusto a la música de Guillermo Buitrago. También comprobé que los últimos 31 días del año tenían un encanto diferente al de los demás meses'.

A Rosendo Romero, el poeta de Villanueva, se le iluminan los ojos al contar los motivos que lo llevaron a componer su inmortal paseo Mensaje de Navidad, grabado en 1980 por Diomedes Díaz con el acordeón de Nicolás Elías ‘Colacho’ Mendoza.

‘Diciembre alegre?: la estocada

Pasaron los años y Rosendo se topó con otro canto distintivo al fin de año: Diciembre alegre, paseo de Emiro Zuleta cantado por Jorge Oñate con los Hermanos López.

Porque diciembre son los más fugaces/ que hay entre todos los meses del año/ cuando uno menos piensa te marchaste/ y llega enero con su cruel verano/ Coro: diciembre alegre te fuiste, diciembre alegre vendrás (bis).

'Esa canción fue una especie de estocada para mí, pues me invitó a reflexionar sobre la Navidad. Yo sentí en ese momento, como el compositor en cierne que era, que el folclor vallenato estaba en deuda con esa bella etapa del año. ¿Cómo es así que el vallenato no tiene una canción dedicada a la Navidad?

Es cierto que en La víspera de Año Nuevo y Diciembre alegre son dedicados al fin de año, pero a la Navidad como tal no se le ha compuesto, dije para mí. A partir de ese análisis la musa empezó a inspirarme', asegura Chendo, como le dicen con cariño a Rosendo Romero.

Pero la canción no la escribió enseguida. Trascurrió otro tiempo prolongado antes de que se metiera de lleno en el ejercicio de la creación.

'Sucedió en Barranquilla, en un repentino e inusual atardecer acariciado por la brisa. ‘¡Caramba, parece diciembre!’, exclamé en voz alta. En esos momentos estaba tocando el acordeón y, sin mayor esfuerzo encontré la melodía que me hacía falta para hacer mi canción. De inmediato empecé a escribir'.

Surge el obstáculo

Enfatiza Rosendo que todo iba bien en la elaboración del tema, en ritmo de paseo, hasta llegó a la parte del coro.

Ahí me atrancó. Sentía que la melodía necesitaba un coro contundente, que atrapara al oyente'.

El bloqueo le duró más de 20 días. A mediados de noviembre, Rosendo encontró por fin el coro: Hay corazones que les da tristeza, que les da tristeza al llegar diciembre/ Hay corazones que al llegar diciembre, que al llegar diciembre se ponen alegres (Bis).

'Yo buscaba una canción que se quedara para siempre en el corazón de la gente y que se escuchara en todos los diciembres venideros con el mismo fervor de las bellas piezas de la Sonora Matancera, de la Billo’s Caracas, de Héctor Lavoe y Willie Colón, y de Richie Ray y Bobby Cruz. Por eso, mi estribillo tenía que ser sentido, evocativo. Y la figura de reiteración que se da en Mensaje de Navidad era necesario. Así, la canción se hacía más sencilla y accesible a los oyentes. Finalmente logré mi objetivo'.

La petición de Diomedes Díaz

Más rápido de lo esperado fue el proceso de la grabación. Y Rosendo, con su memoria fotográfica, reconstruye la historia.

'Termino la canción el 15 de noviembre. Al día siguiente un jovencito mal vestido llegó a mi casa, en Barranquilla, diciéndome que Diomedes Díaz lo había mandado para que yo le enviara una de mis canciones, pues la iba a incluir en el último disco que estaba próximo a grabar. Después de comprobar que en efecto el muchacho no mentía, que ciertamente Diomedes estaba alojado en un hotel de Murillo y que quería una de mis canciones, le envié en un casete mi última producción. Todo sucedió en menos de 40 minutos desde la llegada del jovencito'.

La grabación

A finales de ese noviembre la casa discográfica CBS -por medio de Diomedes Díaz- invitó a Rosendo Romero a Bogotá para que escuchara la grabación de Mensaje de Navidad. '¿Ya? ¡Tan rápido!', fue lo primero que atinó a decir Rosendo al recibir los tiquetes aéreos.

Una vez en los estudios de la extinta editora musical, hoy llamada Sony Music, Rosendo manifestó su complacencia luego de escuchar la grabación.

'Mi gran temor consistía en que fuera rechazada por ser muy larga para la época. Diomedes le cortó un pedazo al final de la letra original, pero ello en nada afectó', dice Rosendo.

¡Arrasador!

Mensaje de Navidad salió en diciembre de 1980 en el long play titulado Para mi fanaticada. Varias de las 11 canciones que incluyó el LP gozaron de amplia difusión, como La juntera, de Marciano Martínez; El romancero, de Roberto Calderón; Camino largo, de Gustavo Gutiérrez; Penando en vida y Palabra sagrada, de Calixto Ochoa. Pero Mensaje de Navidad fue la canción que obtuvo su pasaporte a la eternidad:

Se va el año viene Pascua y Navidades/ y es bonito para los enamorados/ Que se quieran, que se adoren que se besen/ y que tengan Paz y Amor todos los años (bis).