Esthercita, eres y serás por siempre la novia de Barranquilla. Te cuento que anoche me gocé entre faroles y luceros tu Guacherna. ¡Qué noche tan llena de emociones!. Una vez llegué a la carrera 44 mi corazón latía con fuerza y mi vestido se bailaba solo.
El arranque del desfile fue impresionante. Qué alegría tan grande sentí. Ahí estaba, en la calle, bailando al ritmo de las canciones que entonaban Milly Quezada y mi hermana mella Catalina, en contacto directo con mi gente en Barranquilla.
El recorrido lo hice en zig zag, de una acera a la otra, lo que desgastó mis zapatos, pero menos mal llevaba dos pares de repuesto y pude cambiarlos en dos ocasiones.
Ahora, mientras escribo esto, cierro mis ojos y recuerdo los miles de rostros sonreídos que bailaban y gritaban de emoción. Gracias por esos 'te quiero' que escuché, por los 'I love you, gracias por pronunciar mi nombre, gracias por ese derroche de felicidad.
No sé si se dieron cuenta, pero esa noche la luna era especial, era diferente, cortada por la mitad, y de color mostaza. Y entonces comprobé que, efectivamente, 'la luna de Barranquilla tiene una cosa que maravilla'.
Que 'el barranquillero que baila arrebatao' está en todas las esquinas. Y que 'la Guacherna…la Guacherna…' es el verdadero comienzo del Carnaval.
Después de bailar cerca de 30 cuadras puedo decir con total certeza que lo que vi el viernes en el desfile de la Guacherna fue una contagiosa felicidad. Gracias Esthercita Forero por tu legado. Definitivamente nosotros somos un pueblo único. Cosas como estas solamente suceden aquí.
Ahhh… Y un último mensaje: Lo que me incomodó fue la espuma que tiraban y que tuve que esquivar más de una vez. Los que nos vemos en la calle nos vemos con respeto. ¿me ayudan con esto? Así… pues, ¡no más espuma en las carnestolendas a los actores del carnaval! Y nos seguiremos viendo en la calle…