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Alrededor de una caravana de sus colegas periodistas llegó María García Caballero a la esquina de la carrera 59 con calle 79, donde está ubicado su palacio real, La K-Z. El picó anunció su entrada, la pollera empezó su habitual movimiento al ritmo de las caderas de la reina del Carnaval 2016. Ayer, se abrieron oficialmente las puertas de la sede oficial de la gozadera.

'Quiero invitar a todos los barranquilleros a mi palacio real. Esta es la ‘Caseta de la Gozadera’, el punto con más sabor y alegría de la ciudad; les aseguro que va a rendir honor a su nombre, para que todos nos unamos y gocemos juntos. Desde aquí hasta el Miércoles de Ceniza'.Con esas palabras, Marcela dio la bienvenida a los asistentes.

Inspirada en los tradicionales templetes barriales que son gran atractivo durante las festividades, la caseta real vibra por la intensidad de sus colores, que resaltan el logotipo de la soberana de las fiestas barranquilleras. El rojo, el salmón, el amarillo, el verde, el azul, el morado y el fucsia se tomaron la fachada y el interior de la casa, que fue pintada por artistas locales.

El arte y la cultura están por todas partes en el espacio de 90 metros cuadrados. Una lluvia de mariposas, sillas y mesas de madera de colores vivos, cintas colgadas de los árboles y postales de la reconocida fotógrafa Vivian Saad adornan la terraza.

En su interior reciben a los invitados figuras de tamaño real de personajes tradicionales del Carnaval: torito, gorila, el negrito, entre otros, esculturas de la artista plástica Rosa Navarro. Fotografías de la reina tomadas por Emilio Yidi completan la decoración.

Toda esa escenografía fue obra del arquitecto Guillermo Rive

ra, fundador de la comparsa Cipote vaina en 1978, y quien materializó las ideas de Marcela.

El trabajo lo encabezó su mamá, Mireya Caballero, quien llevó la corona en 1982, y su hermana Laura. 'Hay que luchar por salvaguardar las tradiciones de Barranquilla, eso autóctono de nuestra identidad. Por eso, los siete colores son los originales de cada uno de los grupos folclóricos de la fiesta; este es el arcoíris del despertar del Carnaval', expresó el arquitecto Rivera.

Con el himno de la soberana de las fiestas de La Arenosa, Una sola gozadera, compuesto por el samario Manuel Ariza, continuó la verbena en la sede, a solo unos pasos de la casa de Marcela. Miembros de la comitiva e invitados especiales se fueron acercando poco a poco para celebrar con ella esta inauguración. Con un bufet de fritos continuó la velada.

La soberana aprovechó la presencia de los medios para enviar un mensaje a los padres de familia: 'pongámonos la meta de que no haya ni un solo quemado este mes, alejen a sus hijos de la pólvora, mejor únanse a la gozadera que ya empezó. Pasemos unas fiestas felices y en paz'.

Y mientras llega la Navidad, este fin de semana seguirá recorriendo los barrios de la ciudad para que más barranquilleros se unan al Carnaval, que este año quiere que 'esté más abierto que nunca para todos'.