'¡Ay Jose, ¿por qué te fuiste y me dejaste preñá, sin la plata pa’l paga diario y sin comida que tragá!'. Estas eran las palabras que, desde las 2 p.m. de ayer, se les escuchaba susurrar, en medio del llanto, a las viudas que abandonó Joselito mientras se gozaba la fiesta de Barranquilla durante los cuatro días de Carnaval.
Este grupo de casi 100 desconsoladas mujeres, quienes interrumpieron el desfile folclórico de la calle 84, era comandado por Marcela García Caballero, soberana que por primera vez en la historia de las carnestolendas lloraba a su Rey Momo, quien se había convertido en Joselito.
Pero la reina carnavalera no era una viuda más. Ella quedó vestida de novia y plantada en las puertas del altar, antes de lograr contraer nupcias con el parrandero más grande de la fiesta. Por esta razón, Marcela estaba también acompañada por sus más de siete damas, quienes vestían de cortos trajes color rosa y lamentaban la partida del prometido, junto a Su majestad.
El tradicional desfile, que este año recorrió la calle 85 por motivos de construcción en la 84, ya había iniciado cuando el cortejo fúnebre tomó por sorpresa a los espectadores.
Sobre una camilla y lleno de maicena, Lisandro Polo yacía vestido de smoking y aún luciendo la banda que lo acreditaba como el soberano de la festividad 2016. Pero este rey, a diferencia de Marcela, no aguantó tanta parranda y ron, y desfalleció el último día de Carnaval.
Las viudas, ahora con la ayuda del público, trataban de mantener en pie a la desconsolada soberana, que sollozaba sobre el pecho de su prometido, tratando de despertarlo.
Un camino de dolor. El camino de Marcela para despedir a su Joselito no fue fácil. Además del sufrimiento que padeció por ver a su amado tendido y sin vida, la reina debió lidiar con los ‘imprudentes’ asistentes, quienes deseaban tomarse la última foto con la soberana, en medio del funeral.
Estos actos de cariño del público hacia Su majestad hicieron que Marcela intensificara su paso y su llanto, hasta desmayarse y también caer tendida sobre la camilla, al lado de su fallecido rey Momo.
La aparición de la reina del Carnaval en este recorrido, que culminó en el Parque de la Electrificadora, tuvo como consecuencia un bache de 10 minutos. Sin embargo, el público asistente que veía pasar el desfile se emocionaba al saber que muy pronto verían pasar a la carnavalera, despidiendo su carnaval.
El cortejo fúnebre de Lisandro Polo personificando al parrandero Joselito fue el único grupo en este recorrido que despedía a las carnestolendas 2016. Las otras manifestaciones que se tomaron la calle 85 como escenario, fueron muestra de las danzas más tradicionales del Carnaval.
Alrededor de 90 grupos folclóricos y 60 de los disfraces individuales más destacados de la fiesta, recorrieron este evento cultural, que se da previo al desfile central de Joselito Carnaval, que partió ayer a las 5 p.m. desde el Parque los Fundadores.
La reina siguió despidiendo a Joselito. Cerca de las 4:30 p.m. la soberana dio por terminada su participación en este desfile, y partió hacia otro recorrido en e4l que, en compañía de sus pajecitas de matrimonio y las viudas de su comitiva, continuaría llorando al hombre que la dejó plantada.
En este encuentro, organizado por la Fundación de Arte y Folclor del Atlántico, Fayfa, la cumbia, las danzas de congo y los diferentes ritmos africanos fueron protagonistas.
Niños, jóvenes y adultos pudieron disfrutar de una tarde llena de tradición, en este tradicional evento realizado el último día de la edición 2016 del Carnaval de Barranquilla.
