Las ondas gravitacionales agitaron ayer la ‘marea mediática’ en el mundo. Con el acto oficial que confirmó la detección del fenómeno, que predijo Albert Einstein hace cien años en la Teoría General de la Relatividad, se marcó una nueva etapa en la astronomía. El estudio y la exploración humana del Universo tienen ‘nuevos ojos’.
'Señoras y señores, hemos detectado las ondas gravitacionales. Lo hemos conseguido', anunció con orgullo David Reitze, director ejecutivo del Observatorio de Interferómetro Láser gravitacional-Wave (Ligo, por sus siglas en inglés), quien recibió una gran ovación en una sala abarrotada de científicos y periodistas.
Observatorio Ligo.
Las ondas fueron captadas el pasado 14 de septiembre por los dos detectores de Ligo, uno localizado en Livingston (Luisiana, EE.UU.) y otro en Hanford (Washington).
El evento, que fue trending topic mundial en Twitter, volvió a fijar la mirada en los postulados de Albert Einstein, que un siglo después sigue dando cátedra, pero... ¿qué son exactamente las ondas gravitacionales?.
Un ejemplo para comprender: 'Si arrojamos una roca a un lago veremos cómo el impacto genera pequeñas olas desde el punto en el que cae la piedra', relata Enrique Anzures, secretario de la Sociedad Astronómica de México, quien explica que algo parecido ocurre en el Universo a gran escala.
'Si tuviéramos la capacidad de ver estas ondas sería más o menos de esa manera. La roca sería la colisión de dos agujeros negros. Einstein predijo que cuando dos objetos muy masivos chocan deforman el espacio-tiempo y emiten ondas que viajan a la velocidad de la luz', explicó el experto mexicano, para quien los científicos de Ligo expresaron la importancia del hecho de una forma poética.
'Por primera vez la humanidad está escuchando la sinfonía del Universo. Esa es la analogía de las ondas gravitacionales', comenta Anzures.
En el centenario de la Teoría General de la Relatividad, las ondas gravitacionales emitidas por los dos 'cadáveres de estrellas', agujeros negros supermasivos de 29 y 36 veces la masa del Sol, que colisionaron hace 1,3 billones de años, fueron las que detectaron los instrumentos de Ligo.
Los científicos, durante la rueda de prensa, afirmaron que lo emocionante es el hecho de abrir una nueva ventana al Universo a través de esta tecnología.
El astrofísico Jorge Zuluaga, de la Universidad de Antioquia, explica cómo funciona el laboratorio que logró captar las ondas que Einstein creyó indetectables.
'Son dos tubos al vacío que ocupan varios kilómetros y son atravesados por rayos láser que perciben las alteraciones del espacio-tiempo causadas a escalas muy pequeñas por las ondas gravitacionales, que nosotros no logramos percibir', describe Zuluaga, y señala que las ondas de luz, sonido y las gravitacionales son 'mensajeras' que traen información de rincones lejanos.
Nacimiento de la astronomía gravitacional. Aunque el fenómeno ya se había captado de manera indirecta, el desarrollo de la tecnología para estudiar estas ondas, que atraviesan el Universo, constituyen en sí mismas un avance que marca un hito en la historia de la astronomía. Así lo corrobora César Ocampo, investigador para Odyssey Space Research y Nasa- Johnson Space Center en Houston, Texas.
'Las ondulaciones son muy difíciles de detectar, ocurren casi a escala atómica. Einstein dijo que no creía que se pudieran crear instrumentos tan precisos para estudiarlas. Por eso esta es otra ventana de información al Universo, que trae el perfeccionamiento de los instrumentos y nos acerca más a entender la ‘tela’ del espacio-tiempo, con ello la naturaleza del Cosmos', afirma Ocampo, quien comenta que los registros confirmados son el resultado de décadas de trabajo científico.
'Podremos ver cosas que están fuera del alcance de las herramientas que trabajan con las longitudes de ondas de la luz, como los telescopios. Es otra forma de detectar y medir el espacio', señala.
A partir de Ligo se están creando nuevos laboratorios de ondas gravitacionales en distintos puntos del mundo como Australia e India y también se probará un satélite en el espacio.
La Relatividad de Einstein en el siglo XXI. La Teoría de la Relatividad en cien años ha pasado de los libros de física a la cotidianidad, con el desarrollo de tecnologías como la fibra óptica o los satélites que se sincronizan con la ecuación de Einstein para poner a funcionar el sistema global de internet, entre otras aplicaciones. Los expertos coinciden en que los beneficios de perfeccionar herramientas como Ligo se verán reflejadas en los próximos años.
'Cuando países como Colombia y México avancen en la generación de ciencia y tecnología podrán aprovechar los beneficios que se derivan de la generación de estos conocimientos, que no solo son astronómicos', anota el investigador mexicano Enrique Anzures.
Nuevos ojos para mirar el Universo, un sentido para escuchar la 'sinfonía del Cosmos' son algunas de las declaraciones que despierta el descubrimiento que hace cien años predijo Einstein, quien sigue dando cátedra.
¿Qué son?
Albert Einstein formuló en su Teoría de la Relatividad General la existencia de las ondas gravitacionales, una especie de olas en el Universo. Pero la comunidad científica probó de manera objetiva, después de cien años, que tenía razón una de las mentes más privilegiadas del siglo XX.
1. Usando una metáfora, la Universidad de las Islas Baleares en España las define como 'olas en el océano cósmico'.
2. Einstein descubrió en su teoría que los objetos que se mueven en el Universo producen ondulaciones en el espacio-tiempo.
3. Son tan pequeñas que el Universo es ‘transparente’ para ellas, lo atraviesan todo. Se requieren grandes instrumentos para captarlas.
4. Con las ondas gravitacionales sería como ‘oír’ los eventos violentos del Cosmos, como el choque de agujeros negros.
Otros instrumentos
Tecnología con que se estudia el Universo, además de Ligo:
Telescopio Hubble. Ubicado fuera de la orbita terrestre, puede observar más de un millón de objetos; el ojo humano solo puede ver 6 mil estrellas a simple vista. Funciona con la longitud de onda ultravioleta, visible e infrarrojo cercano.
RadioTelescopio de Arecibo. Ubicado en Puerto Rico, con su antena circular de 576 metros de diámetro, recolecta datos radioastronómicos, aeronomía terrestre y radar planetarios para estudios científicos.
Observatorio Chandra de rayos x. Es el tercero de los Grandes Observatorios de la Nasa. Puede observar el cielo en rayos X con una resolución mil veces mayor que el primer telescopio orbital de rayos X.
Evento científico de tendencia global
La física, la astronomía y la ciencia no suelen ser materias que se paseen por la altas cumbres de la redes sociales; sin embargo, el anuncio de que se detectaron las ondas gravitacionales, predichas por Albert Einstein hace cien años, se convirtió en tendencia mundial en Twitter.
Sin embargo, el tema impulsó a la mayoría de los internautas a dedicar un buen rato a entender la transcendencia del anuncio; quizás por eso internet no se llenó automáticamente de ‘memes’, porque hacer un gracia sobre ondas gravitacionales requiere demasiado conocimiento.
'Mayor noticia que Trump', aseguró en un tuit el humorista y presentador de los Óscar Seth McFarle, en relación al precandidato republicano a la Casa Blanca.
Lo que más sorprendió a los internautas fue descubrir que el mundo ha necesitado de un millar de científicos de 16 países para confirmar, con hechos, algo que Einstein predijo con una tiza y una mente privilegiada.
'Einstein fue un tipo verdaderamente muy listo ¿Seguramente nosotros podemos resolver problemas más simples como el calentamiento global?', se preguntaba intrigado el diario ‘The New York Times’ en un tuit.