Chachariá, en palenquero, significa hablar. Es la palabra que referencia el diálogo entre personas adultas y una acción que ubica a esta comunidad en el mapa lingüístico de Colombia como una de las dos lenguas criolla que existen entre las 68 lenguas nativas del territorio nacional.
El conjunto de formas vocales y expresiones usadas por las comunidades de hablantes indígenas, afrodescendientes y romaníes del país son celebradas hoy, en el Día Nacional de la Lenguas Nativas, una iniciativa del Ministerio de Cultura que destaca el valor patrimonial de las lenguas y su rol como elemento transmisor de las cosmovisiones y prácticas de las poblaciones, como la palenquera.
Palenque chachariá
'Lengua ri pelengue a senda ngande pokke ele nu ma andi mundo', expresa Manuel Pérez, líder palenquero, quien en español traduce al instante: 'la lengua de palenque es importante porque es única en el mundo'.
La formación de esta lengua tiene base léxica española y es hablada actualmente en la comunidad de San Basilio de Palenque, en Cartagena y Barranquilla, tres puntos donde se concentra esta comunidad afrodescendiente. El último censo del Dane, de 2005, reportó 7.470 personas autorreconocidas como palenqueros, los cuales representan el 0,02% del total de la población en Colombia.
Manuel, quien es miembro del Consejo Nacional Asesor de Lenguas Nativas, vive en Palenque, y desde allí recuerda el contexto histórico en el que se formó su dialecto, que hace parte de las lenguas criollas, las cuales surgieron como una necesidad de comunicación entre los africanos esclavizados, en la época colonial, que provenían de diferentes etnias de África Occidental. Por esta razón, chachariá, en palenque, es un símbolo de resistencia.
Mapa de lenguas nativas.
'Es un vehículo de trasmisión de los valores identitarios. Nosotros nunca vamos a olvidar que esta lengua fue atacada en esa época en que era complicado ser palenquero, por ser negro, por hablar mal el castellano y porque era algo desconocido para muchos', comenta Pérez, quien agrega que aun cuando existe una ley que la protege, la lengua sigue siendo desconocida.
La palabra Entenguesá, en el Diccionario de la lengua afro palenquera, escrito por Solmery Cásseres, está consignada como una expresión que se referiere a las personas adultas o niños que tienen demasiado que entender.
'Hace tres décadas, hablar lengua palenquera era una razón de vergüenza. En Cartagena cuando alguien no se expresaba bien le decían: estás hablando maluco, como los palenqueros', comenta Moisés Medrano, director de Poblaciones del Ministerio de Cultura, quien señala que estos imaginarios culturales afectaron el uso y con ello debilitaron la continuidad de la lengua en un importante segmento de la población.
Viviano Torres, más conocido como Anne Swing en el círculo musical de la champeta, corrobora esta situación.
'En épocas pasadas se burlaban de nosotros por hablar así. Nuestros padres creían que debían olvidarla por eso, porque era un motivo de burla, pero hoy nosotros vemos un motivo de fortaleza', asegura.
Bololó es un adjetivo de origen kikongo (lengua bantú) que significa problema o escándalo grande, como los que recuerda Manuel que sucedieron antes de que fuera reconocida su cultura .
'En la década de los noventa se hizo visible la iniciativa de etno-educación para Pelenque, para que se enseñara en los colegios, pero no fue fácil. Fue una lucha con las instituciones para poder implementarlo', cuenta Pérez, quien es docente.
En Barranquilla está radicada el 32,73% de la población palenquera en una colonia que se extiende en los barrios de Nueva Colombia, La Manga y El Valle, en el suroccidente de la ciudad. En esa zona está ubicado el Centro Etnoeducativo Paulino Salgado Batata, institución que fue objeto de estudio de una investigación por parte de docentes de la Universidad del Atlántico que realizaron un diagnóstico sobre el uso de la lengua palenquera en estudiantes de tercer grado del centro educativo.
El estudio incluyó entrevistar a los niños para conocer en qué espacios es utilizada la lengua nativa.
El 80% de los estudiantes respondió que no hablaba palenquero; el 7% afirmó que usaba su lengua para hablar entre amigos, mientras que otro 7% dijo que lo hacía en su casa. Un 3% afirmó hablarlo en la escuela, mientras que un porcentaje igual no respondió.
Para Carmen Barrios, una de las autoras del análisis, este segmento de la investigación evidencia que el diálogo se encuentra en desventaja frente al uso de sus hablantes. 'Los niños, al interior de sus hogares, están bajo la influencia de la lengua castellana. Algunos entienden el palenquero porque los abuelos y líderes comunitarios la usan, pero ellos la practican poco. Es un trabajo que se necesita fortalecer', comenta Barrios.
Una de las estrategias para conectar a las nuevas generaciones con esta tradición oral es la música. Carmen, al ritmo de la champeta Minikusuto, de Anne Swing, desarrolló una clase magistral para enseñar las sílabas en el lengua palenquera.
Para el artista, ícono de la champeta, su lengua es un medio de comunicación en recuperación. 'En mi casa estamos retransmitiendo la lengua a mis hijos, ellos ya hablan palenquero. El trabajo de recuperación se hace desde nuestras casas', cuenta el músico.
Las letras de este dialecto sonoro, en la actualidad, se van de ‘gira’ a Europa con la champeta de Anne Swing; pero también han dialogado con los ritmos acústicos de músicos como Roberto Camargo. 'Con la ayuda de varios músicos y una persona que maneja la lengua, hicimos una traducción de una letra que había compuesto hace tiempo en español. Me llamó la atención que el lenguaje es muy sonoro, aunque no entendamos lo que dice la letra', comenta Camargo, para quien la prevalencia del acento en la última sílaba y el uso de la ‘l’, de la ‘m’ y de la ‘b’ generan construcciones orales 'sonoramente muy ricas¨.
Para Moisés Medrano, de Mincultura, el proceso que adelanta Palenque y sus colonias es un ejemplo de cómo los procesos comunitarios tienen una fuerza significativa en la revitalización de las lenguas. 'Ellos iniciaron un proceso en el que el punto de partida fue reconocer un factor identitario que es su condición de palenqueros y cimarrones'.
Anne Swing coincide con la opinión de Medrano y para él la responsabilidad de su generación es dejar como legado a los niños y jóvenes una lengua fortalecida.
Mapa de las lenguas nativas
Este mapa contiene los nombres de las 65 lenguas indígenas, o indoamericanas que se hablan en el país. Según un estudio de la Universidad de los Andes y el Centro Colombiano de Estudios de la Lengua Aborígenes en Colombia, tres lenguas indígenas tienen más de 50 mil hablantes: Wayuu,Paez y Embera.
Ocho tienen entre 10 mil y 50 mil hablantes, nueve son habladas por entre 5 mil y 10 mil hablantes, once tienen entre mil y 5 mil hablantes, las 34 restantes tienen menos de mil hablantes. Por otra parte, son dos lenguas criollas: el creole de base léxica inglesa de San Andrés, Providencia y Santa Catalina; y la lengua Palenquera. En Colombia, también se encuentra, la lengua Rromaní hablada por el pueblo Rrom o Gitano presente en diferentes departamentos del país.
Celebración Día de las Lenguas Nativas
La ley 1381 de 2010 o Ley de Lenguas Nativas reglamenta el desarrollo de planes, proyectos y programas encaminados a salvaguardar y visibilizar el patrimonio lingüístico de Colombia. La conmemoración de hoy se estableció en el marco del Día Internacional de la Lengua Materna declarado por la Unesco en el año 2000.
En Barranquilla
A propósito de la celebración nacional, la Sala de la Gente del Museo del Caribe abrirá hoy sus puertas para contar la historia de la construcción de la identidad regional. También estarán disponibles las Ventanas de Identidad, una serie de dispositivos audiovisuales que nos sumerge en la diversidad de culturas como los Wayúu, Arwakos, Kogui, Kankuamo, Ette Enaka, Tule, Zenú, Raizal y Palenques, que habitan en el Caribe colombiano.