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En Mampuján, corregimiento de María La Baja, Bolívar, nacieron estas telas que narran las vivencias del conflicto armado y el anhelo de paz de las mujeres de este pueblo del Caribe. Ellas, ejemplo en procesos de restauración del tejido social, llevarán sus telares a la Feria Internacional del Libro de Bogotá –Filbo– para que otras personas lean, entre las costuras y los retazos de colores, sus historias.

'Yo me imaginé que podíamos exponer en muchas partes, menos en una feria del libro', dice entre risas Juana Ruiz, quien es una de las líderes del grupo llamado ‘Mujeres tejiendo sueños y sabores de paz’, que llevará sus telares emblemáticos y realizará otros en vivo durante el evento cultural, que se realiza en Bogotá desde ayer y hasta el 2 de mayo.

El espacio destinado a esta y otras experiencias en las que el arte y la cultura se convierten en un instrumento de restauración social es la VI Fiesta de las Lenguas, que se realiza en el marco de la Filbo. Este evento, que se desarrolla en medio en feria, surge como parte de la estrategia de ‘Formación de formadores’ de la Dirección de Poblaciones del Ministerio de Cultura, con el fin de fortalecer los colectivos que trabajan por la reparación simbólica del conflicto armado interno, como las tejedoras de Mampuján, quienes ganaron el Premio nacional de Paz en 2015.

'Nosotras empezamos a pensar en hacer los telares en forma artística en 2006, porque cuando inició era solo una terapia para sanar el trauma y canalizar los duelos del conflicto', relata Juana. Ella y las 40 mujeres que iniciaron el proceso se dieron cuenta de que las telas donde plasmaban su dolor también tenían un sentido estético.

'Decidimos seguir haciendo las telas, pero ya como una obra de arte, que hablara por sí misma con cada dibujo. Los telares expresan el sentimiento de la persona que lo hace, pero también el que mira interpreta y siente lo que ve', continúa la líder comunitaria.

En las composiciones de las telas se destaca el colorido de la vegetación y los animales cotidianos de los Montes de María; sin embargo, en ese escenario natural también aparecen escenas de asesinatos y los rostros de los familiares y amigos desaparecidos o muertos en medio del conflicto armado.

'Nuestro grupo de mujeres ha compartido esta experiencia en otros lugares como Soacha, en otros corregimientos. La idea es que otras personas también sean sanadas a través del arte'.

Algunos telares de las mujeres de Mampuján están exhibidos en el Archivo General de la Nación.

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El arte y la paz

Moisés Medrano, quien dirige la Dirección de poblaciones de Mincultura, resalta que como estas hay otras experiencias que hicieron parte del proceso que inició en el año 2015, con las jornadas del proyecto titulado ‘La experiencia reparadora de la cultura’.

'Hay trabajos interesantes alrededor del cine en Cali; hay un grupo de niños en Trujillo, del Valle del Cauca, que son huérfanos de la guerra y a través de la escritura están produciendo relatos de sus vivencias, entre otras iniciativas en el país', comenta Medrano, quien además señala que en los Montes de María también hay procesos relacionados con la música y la tradición oral. 'Mientras los niños en Trujillo escriben, en el Caribe cantan esas tragedias y a través del canto inician procesos de reconciliación y de diálogo'.

A la Filbo llegará una muestra de estas experiencias que reflejan el sentido reparador de manifestaciones artísticas como la danza, la música, el cine, literatura y teatro, generando el diálogo y la articulación entre los gestores culturales, las organizaciones sociales de víctimas y los ciudadanos. Los eventos de este espacio se desarrollarán entre el 21 de abril y el 1 de mayo.