A sus 15 años, Luis Felipe Cristancho Moreno está convencido que para tocar el acordeón no es necesario que en sus venas corra sangre vallenata.
Con su rostro 'chapeado' por el calor de Valledupar, fue uno de los 54 concursantes que este miércoles participaron en las cuatro tarimas que se ubicaron en el campus de la Universidad Popular del Cesar, sede Sabana.
Este bogotano, asegura que conformar la lista de los inscritos en la categoría Juvenil fue fruto de la dedicación a la música y el apoyo de su padre, también oriundo de la capital del país y quien le enseñó las primeras melodías de este instrumento cuando Luis Felipe apenas era un niño.
Lleva cuatro años recorriendo la ciudad de los Santos Reyes con su acordeón al hombro y cuenta que al principio su afinidad por el vallenato resultaba tema de chiste entre sus amigos. Asegura que interpretar aires como el merengue es una de sus fortalezas.
'Cogerle sabor al vallenato es un reto. Es cuestión de gusto tocar este instrumento', agregó el joven acordeonero después de finalizar su presentación en el concurso de acordeoneros.
'En Valledupar están los mejores'
Que la gente conozca a Miguel Castro Bracho como primo del maestro Colacho Mendoza no es solo motivo de orgullo sino además una responsabilidad al momento de subirse al escenario.
El participante de 13 años desde el pasado domingo llegó desde Arjona (Bolívar) hasta Valledupar para presentarse en la categoría Infantil en el concurso de acordeones.
'He escuchado que aquí nacen los mejores y los que quieren ser grandes se presentan en este Festival', aseguró el artista.
No va a las fiestas sin su inseparable primo Martin Elias Díaz, quien es el cantante del grupo vallenato que conformó hace dos años.
Su madre también lo acompaña y aunque no contaba con el dinero para pagar los gastos del viaje, no tuvo reparo en caminar el pueblo para pedir dinero y apoyar a su hijo.
Así como Luis Felipe y Miguel, todos los concursantes llegan con el mismo anhelo de alcanzar la gloria vallenata y relucir su talento y destreza con el acordeón.
Este año ya se completan 49 años desde que en época de acordeones comienza la competencia por las coronas del Festival de la Leyenda Vallenata.
Destreza, imaginación, rapidez y velocidad son algunas de las habilidades que según los asistentes y amantes a este certamen deben caracterizar a los competidores.
El año pasado se presentaron 107 grupos en la categoría Juvenil, 76 profesionales; 65 aficionados, 50 infantiles, 66 verseadores y 72 compositores. Este año, aunque la cifra es menor en algunas categorías, el empeño y el amor por el folclor vallenato se mantienen.
