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Carlos Vives y Shakira presentaron este viernes a nivel internacional el video de su colaboración ‘La Bicicleta’. Santa Marta y Barranquilla, sus ciudades de origen, también son protagonistas en el videoclip de casi 4 minutos de duración, a través de algunos de sus escenarios más representativos. Además, tanto el samario como la barranquillera visitan lugares que tienen un significado especial en sus vidas.

A los nacidos en la costa Caribe colombiana las imágenes del videoclip les llegan directo al corazón, pues para ellos es muy fácil identificar estos lugares y situaciones que hacen parte de la cotidianidad e idiosincrasia costeña, sin embargo, un extranjero o incluso una persona nacida en Bogotá o Medellín que vea el corte musical podría necesitar una explicación del significado tan especial que este tiene para Carlos Vives, Shakira y el resto de oriundos de la costa.

A continuación, un listado de lo que hay que entender para disfrutar de ‘La bicicleta’ a lo costeño:

Años atrás, antes de las consolas de videojuegos y teléfonos móviles, el mejor regalo de navidad para un niño era una bicicleta. En aquel entonces en las ciudades costeñas el tráfico no era desesperante como lo es hoy y cualquiera podía pasearse por las calles sin temor de ser arrollado por un vehículo particular, o en el peor de los casos por un taxi o un bus de servicio público.

Los pies descalzos de Shakira en el video significan más que una referencia a su primer álbum lanzado internacionalmente en 1995, o a la fundación que ella lidera. Cuando la artista vivía en Barranquilla era muy común ver a los niños jugar en las calles sin zapatos; hoy en día esa práctica, que disgustaba a los padres, se ha visto reducida.

El video muestra a Carlos Vives paseándose en Santa Marta y a Shakira en Barranquilla, las dos ciudades hacen parte de la región Caribe colombiana y se encuentran en los departamentos del Magdalena y del Atlántico, respectivamente. Estas se ubican a 104,9 km de distancia y a una velocidad prudente le tomaría a una persona dos horas aproximadamente desplazarse de la una a la otra.

Las escenas de Carlos Vives que abren el video lo muestran posando en el frente de una casa colonial ubicada en el centro de Santa Marta, después lo vemos pasar sentado en la chaza de una camioneta por la calle primera de esta ciudad, en la que se ubica el malecón de la bahía. Desde esta playa se observa el emblemático Morro samario, que también aparece en el clip.

El trancón en el que se encuentran los artistas fue recreado en las playas de Puerto Velero, que se ubica a 15 minutos de La Arenosa, en la vía opuesta a Santa Marta, sin embargo, esta escena muestra un panorama similar al que una persona se encuentra en Ciénaga, yendo hacia esa ciudad. Los puestos de fruta hechos de palo son muy comunes en ese recorrido. Mango, mamón y corozo, fueron algunas de las delicias Caribe degustadas por Shakira en ‘La bicicleta’.

En algunas escenas, que si espabilas te puedes perder, se ven unas casitas construidas en medio de la Ciénaga Grande de Magdalena. Estas están ubicadas en Nueva Venecia, un corregimiento de Sitionuevo.

Si una persona viene de Santa Marta a Barranquilla, al atravesar el puente Laureano Gómez, popularmente conocido como Pumarejo, al entrar encontrará el letrero que dice 'Bienvenido a Barranquilla', que se ve en los primeros segundos del video, en los cuales se muestra a Shakira mientras hace un recorrido en carro contemplando las calles de su ciudad natal.

Luego del letrero aparece el puente antes mencionado, que próximamente será reemplazado por uno más grande llamado oficialmente Alberto Pumarejo. El edificio llamado ‘Miss Universo’ por las curvas sensuales en su diseño, que aparece después, se encuentra ubicado en el corazón del barrio El Prado de Barranquilla y es considerado por muchos como un ícono de la capital del Atlántico.

La avenida del río es otro de lugares barranquilleros que aparecen en el video. Este rincón turístico, inaugurado en diciembre de 2012, se ha convertido en una parada obligatoria para propios y foráneos debido a su cercanía con el río Magdalena, el más largo de Colombia, y la fuerte brisa que sopla allí, que reduce el impacto del sol que brilla en este lugar con poca arborización. Mientras Shakira y Vives ruedan sus bicicletas allí se refrescan con un ‘raspao’.

El ‘raspao’ es un granizado representativo de la costa Caribe colombiana, compuesto por hielo raspado, endulzado con esencias de kola, limón o tamarindo, principalmente, y servido en un cono de papel.

En uno de los momentos más sentidos del video, Shakira y Carlos Vives entran al colegio ‘La Enseñanza’, en el cual ella realizó sus estudios de básica primaria y secundaria y al que no había regresado en muchos años. Las estudiantes se encontraban en clases, como de costumbre, y cuando supieron lo que estaba pasando en los pasillos, salieron a abrazar y darles besos a los artistas colombianos, como se muestra en el clip.

A lo largo de la producción hay escenas en las que Shakira va en un jeep de color amarillo, conducido por su amiga de la infancia y estilista de este video Kathy Kopp, recorriendo las calles de Barranquilla junto a Carlos Vives. Una de estas es donde se ubica el edificio en el que viven sus padres frente al parque Rosado, al norte de la ciudad.

El fútbol es otro de los elementos que tiene lugar en esta grabación. Aunque la emoción de este deporte la comparten los colombianos con el resto del continente y países europeos, en la costa a los niños se les enseña a jugarlo desde muy pequeños -con latas aplastadas, checas, bolas de papel o bolas de trapo, si no hay un balón adecuado- y en las calles o en la playa como hacen Shakira y Carlos Vives en Puerto Velero en escenas del videoclip. Ambos lucen las camisetas de los equipos de Barranquilla y Santa Marta, el Junior y el Unión Magdalena. Además, en otra escena Carlos Vives se pasea en su bicicleta en una cancha sintética construida en un barrio samario.

En resumen, el video no solo evoca la nostalgia que sienten Shakira y Carlos Vives ahora que están radicados afuera, ella en Barcelona, España, y él en Miami, Estados Unidos, sino que también le muestra al mundo la cotidianidad Caribe que aquí se vive y transporta al espectador por cuatro minutos a la alegría, sencillez y sabor del verdadero costeño.