María Isabel Palencia y su hija Penélope Garcerán, de 10 meses de nacida, fueron algunas de las sorprendidas con el concierto folclórico ‘sobre ruedas’. Ayer, cerca de las 4:30 p.m., la agrupación Bozá subió a uno de los articulados de Transmetro para brindar a los usuarios del servicio de transporte público un abrebocas de lo que será la próxima edición del Barranquijazz.
Con la flauta, las maracas y una guitarra en mano, los tres integrantes del grupo barranquillero (Alain Leang Manjarrés, Ailan Manjarrés y Jorge Guerrero) no dudaron en viajar en el automotor, para deleitar a los presentes con lo mejor de su característica fusión de ritmos tropicales y electrónicos.
Al partir de la estación Joe Arroyo hacia la calle Murillo, Pénelope y su madre, junto a los varios usuarios que llenaban el bus, disfrutaron de una creativa versión de El evangelio, tema original de Wganda Kenya. Al finalizar la interpretación, los aplausos no se hicieron esperar y, aunque Penélope no chocaba sus palmas, su atención hacia las maracas dio a entender a Bozá que hasta los más pequeños se interesan por la música.
'Excelentes estas presentaciones culturales. Llaman mucho la atención. Hasta mi bebé, que tiene solo 10 meses, estaba muy emocionada', expresó María Isabel.
Previo al ‘toque’ en bus
A las 3 p.m. empezó la preparación de Bozá. Una vez la flauta de millo sonó, muchos de los que se disponían a tomar su bus detuvieron su rápido paso para detenerse a apreciar la muestra folclórica. Emiro Herrera esperaba uno de los articulados del servicio, pero no dudó en salirse de la fila y posarse en un muro cercano al espacio donde tocaba Bozá, para apreciarlos de cerca. 'Espectacular. Sería bacano que estuvieran todos los días por aquí, para hacer más amena la espera en la estación'.