Los murales plasmados en las calles de Colombia fueron la musa que inspiraron el Aruba Art Fair, que este fin de semana tuvo lugar en la ciudad de San Nicolás con la única misión de rescatar, a través del arte, esta zona oeste de la Isla Feliz.
'Después de ese recorrido en Colombia volví a Aruba con la inquietud de hacer algo en las calles que convirtieran a la isla en un destino artístico, partiendo del talento local', expresó el director del evento, Óscar Bolívar.
Más de 150 artistas de Aruba, entre artesanos, bailarines, teatreros y pintores, así como 15 talentos del mundo, se sumaron a la iniciativa de recuperación de la ciudad que, a pesar de su herencia histórica, se mantuvo un largo tiempo en el olvido como una zona industrial, apartada del turismo que le da vida a la 'isla más feliz del mundo'.
'Hubo una convocatoria abierta y se recibieron a todos los inscritos, luego clasificamos las propuestas y les dimos un sector de intervención a cada uno, teniendo hoy zonas de murales, videoartes, artesanías, cuadros y fotografías en San Nicolás', explicó el curador Luis Gómez, 'satisfecho por haber conseguido utilizar una herramienta superpotente como es el arte para dinamizar un espacio'.
Talento colombiano
El arte de Colombia, por supuesto, debía ir más allá de la idea inspiradora y traspasar los muros de nuestro país para llegar hasta la punta arubiana donde cada mañana los isleños ven salir el sol. Ahora, además de los tantos colombianos que habitan la isla, en la tienda La Aruba dos grandes y coloridos rostros arubianos, pintados por el muralista bogotano Óscar González, atraen a habitantes y turistas, tal como lo imaginó cuando decidió plasmar su obra, inspirada en la magia del entorno.
'La idea es que se cambie este concepto del turismo consumista que no permite contacto con la cultura local, hay que descubrir lo que hay más allá de las lindas playas', sugirió el diseñador gráfico de 35 años que, muy a pesar de las connotaciones colombianas, se hace llamar ‘Guache’ por su significado guerrero en música.
'Definitivamente se puede vivir del arte, solo hay que ser constantes, disciplinados, siempre experimentar y tener nuevas propuestas', agregó al frente de su nueva obra el artista que ha guerreado con 'un muralismo clásico con elementos de grafiti, arte callejero y una gráfica contemporánea'.
Vale decir que el mural de Guache fue el telón de fondo de la cantante Gloria Vega para amenizar con su swing colombiano las noches de la feria. La intérprete puso a bailar a los asistentes de varias nacionalidades temas como Te olvidé, en una presentación tan nuestra que incluyó la figura de la muerte.
Durante el Fashion Show, que dio apertura al Aruba Art Fair la noche del pasado viernes, el diseñador paisa Luis Benjumea, junto a María Teresa Madariaga, expuso los diseños de sus bolsos que han materializado manos de artesanos bogotanos.
'En el arte contemporáneo siempre estamos buscando romper esquemas y paradigmas, por eso quisimos apostarle a una pasarela en la calle, muy elegante y pasional', contó el diseñador de la marca Madariaga & Benjumea después del desfile callejero en el que también se mostraron las colecciones de Atelier Dore, Gigliola Gomez, David Paulus y Elisa Lejuez.
La magia del muralismo
En total, 16 murales revivieron las calles de San Nicolás. Los arubianos, entre las más de cinco mil personas que congregó el evento, aún no salen del asombro ante llamativas obras de arte, como la enorme iguana de unos siete metros de alto y tres de ancho que, por ser el animal representativo de la isla, recreó el portugués Bordalo II con unas tres toneladas de basura, incluyendo elementos como defensas de automóviles, mallas de pescar y rejillas de abanicos.
'Fue uno de los artistas más esperados, su esencia está en la capacidad de ver arte donde el resto solo ve basura', dijo Tita Pena, organizadora del evento, quien coincidió con la arubiana Angel Natal en que esto también representaba 'el progreso de la isla'.
'Como habitante estoy contenta de que este plan artístico tenga lugar en San Nicolás, que por mucho tiempo fue olvidado. Ya he venido dos veces a tomarme fotos aquí con mi mejor amiga y nuestros hijos, porque me da orgullo tener un arte reconocido tan cerca', expresó la especialista en marketing.
El mural en 3D del artista Leon Keer también fue el lugar escogido por los asistentes para tomarse sus mejores fotos, inmersos en la ilusión óptica de la caja de cartón.
*Enviada especial
