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Tener una vejez larga y saludable es el deseo de la mayoría de las personas, pero si su meta es llegar más allá de los 125 años, probablemente no lo logre.

Aunque el promedio de vida puede variar en cada país e incluso en cada persona, un grupo de científicos de la Escuela de Medicina Albert Eisntein de Nueva York, fijo el limite de la vida de un ser humano en los 125 años, siendo esta una meta poco factible de llegar para los expertos.

'Los motivos por los que el promedio de vida en un lugar pueda avanzar o disminuir, depende de factores como el nivel económico de ese lugar, que afectará la calidad y frecuencia de alimentos que consuma el individuo, el acceso a servicios públicos, nivel de calidad del aire, seguridad para habitar, etc', explica Dereck De la Rosa, Médico internista y docente de la Universidad del Norte.

Para este estudio, los investigadores se basaron en la Base de Datos de Mortalidad Humana (HMD, en inglés) puesta en marcha en 2002 por la Universidad de California y el Instituto Max Planck para la Investigación Demográfica.

'En contra de lo previamente sugerido, que la longevidad humana puede extenderse más allá (de los límites observados hasta ahora), nuestros datos sugieren de manera sólida que la esperanza de vida está limitada de forma natural', afirma Jan Vig, líder de la investigación.

Según los científicos, la esperanza de vida se ha incrementado en la mayoría de países durante los últimos 150 años, aunque empezó a detenerse a partir de la década de los 80’s. En Colombia, con base en cifras del 2015 de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el promedio de vida está entre los 71 años para los hombres y en 78 para las mujeres.

'La principal causa de muerte en el país es la violencia, después le siguen enfermedades del corazón. En personas mayores los motivos están más ligados a envejecimiento propio de los órganos como diabetes, disfunción arterial y enfermedades respiratorias', asegura el médico geriatra Bartolome Bacci Miranda.

Una de las conclusiones a la que se llegó con el estudio, es que a diferencia de lo que se creía, la longevidad de las sociedades no está ligada a procesos evolutivos y no depende de aspectos como la selección natural, si no que resulta 'una consecuencia de los programas genéticos establecidos en las primeras etapas de la vida, como el primer desarrollo, el crecimiento y la reproducción', dice Vig.

Una vida más larga

Según los expertos, la base de una vida más longeva está en la prevención desde la juventud.

'Lo más importante de llegar a la vejez no es solo la salud, a eso hay que sumarle factores como la estabilidad emocional y económica', comenta el médico geriatra, quien además aconseja basar la alimentación en una dieta equilibrada, en la que se coman las porciones diarias recomendadas —entre tres y cinco — en las que se encuentren porciones de frutas, verduras, carnes y legumbres y se consuma la cantidad de agua necesaria, que debe estar entre un litro y medio y dos litros por día.

Así mismo, mantener una vida activa: 'Hay que evitar a toda costa el sedentarismo, si nuestro ritmo de trabajo no nos lo permite, hay alternativas como usar las escaleras y caminar distancias cortas, seguramente nuestro cuerpo lo agradecerá en la vejez', concluye el médico y docente Dereck De la Rosa.

Más longeva

La francesa Jeanne Calment, que murió en 1997 con 122 años y 164 días, es la persona documentada que más ha vivido hasta ahora, y los científicos creen que es poco probable que ese récord sea superado. Cuando falleció estaba casi ciega y sorda y tenía poca movilidad, pero era admirada por su gran vitalidad.