'Cuando me diagnosticaron cáncer de seno tenía 13 semanas de embarazo', relata Catalina Suescún.
Una de las supervivientes a esta enfermedad que cada año mata a 2.649 mujeres en el país y que hoy conmemora su día internacional.
'Ese día, fui a buscar los resultados de la biopsia, en compañía de mi esposo, mi mamá y mi hermana. Me paré frente a la doctora y le pregunté: ¿salieron mal? Ella solo asintió', cuenta Catalina y continúa.
'Miré a mi mamá y veía cómo se le dificultaba la respiración, creo que al igual que a mí, para ella fue como una sentencia de muerte. Mi esposo intentó suavizar el rato amargo, pero a parte de acompañarme no había nada que pudiera hacer por mí. Estar con mi familia en ese momento fue muy importante para mí, no sé qué habría hecho sin ellos'.
Y es que la compañía y apoyo no solo de familiares, sino también de todo el círculo social y del acompañamiento médico pueden resultar cruciales a la hora de enfrentar este tipo de males.
'Conocer la aparición de cáncer de seno o de cualquier otro tipo de cáncer puede ser una noticia difícil pues se asocia con muerte y dolor. Generalmente, son los médicos tratantes quienes avistan el cáncer y son responsables de notificar a la paciente. El primer paso es saber qué conoce la paciente sobre la enfermedad, para así orientarla y darle un panorama general de su situación', dice Pilar Fernández, psicóloga de la Liga Colombiana Contra el Cáncer, quien dice que toda paciente tiene derecho a cuestionar e indagar sobre la patología, cuantas veces sea necesario.
El acompañamiento médico y familiar, no solo es importante para la estabilidad de la paciente, también puede ser la diferencia entre la completa sanación o no de quien padece el cáncer.
'El cáncer es una enfermedad crónica, pero hay que hacerles entender a las pacientes que no es el fin. En el país mueren más personas por enfermedades del corazón que por cáncer de seno', asegura el cirujano oncólogo mastólogo Sebastián Quintero Camacho, quien es asesor científico de la Liga de Lucha contra el Cáncer.
Cuando Catalina Suescún se enteró que era portadora del cáncer tenía 36 años y dos hijos pequeños y debía tomar la decisión de continuar o no con su embarazo que apenas empezaba.
'Esos fueron momentos muy difíciles. Para muchos la decisión era muy fácil, yo tenía dos hijos y debía pensar en ellos antes que en cualquier otra cosa. Pero yo estaba segura que quería continuar con mi embarazo y mi esposo me apoyó', recuerda Suescún.
Ella tomó esta decisión en compañía de su ginecóloga que en todo momento la mantuvo informada de lo que ocurría con su hija y la asesoraba en cada uno de los pasos que debía dar.
'Hablar con la verdad y explicarles la realidad de la enfermedad será siempre lo mejor para una paciente de cáncer independiente de su condición. Ubicarlas en el contexto real y con claridad de su padecimiento las hará sentir con una mayor confianza', aconseja Sebastián Quintero.
Llevar el cáncer en un entorno de amor y comprensión será siempre la mejor circunstancia para enfrentar esta difícil enfermedad que cada año afecta a 8.686 mujeres al año, según cifras del 2014 del Ministerio de Salud Nacional.
'Validar las emociones de la paciente es otra forma de dar manejo integral. ¿Qué significa? Permitirle expresar si se siente triste, decaída o quiere llorar, dejarlas expresar sus sentimientos. Querer estar solas serán situaciones que se presentarán en algunas ocasiones y que es normal en ese tipo de situaciones', recomienda la psicóloga Pilar Fernández.
Después de un tiempo Alicia, una pequeña de escasas libras, nació del matrimonio entre Catalina Suescún y Diego Ponce de León. Su madre aún continuaba con quimioterapias cuando ella llegó al mundo y las seguiría recibiendo hasta varios meses después, pero ella era un bebé sana, que se convirtió en un símbolo de esperanza para su familia.
'Lo más importante es no referirse con frases negativas a las pacientes. ' Es una noticia terrible', se debe cambiar por 'aunque es una noticia difícil, estamos aquí para ayudarle a afrontar esta situación', recomienda la experta Pilar Fernández.
Hoy, Catalina es una mujer nueva
'Cuando me dijeron que estaba sana, volví a vivir. Hoy puedo decir que tengo dos años de vida', afirma optimista.
Para ella lo más difícil luego de recibir la noticia de su total recuperación fue 'reconocerme a mí misma y reconocer y aceptar todo lo que había pasado'.
'Hoy vivo minuto a minuto y me preocupo más por mi tranquilidad y paz interior. Siempre recuerdo que las enfermedades nacen en el corazón, se fortalecen en la mente y se manifiestan en el cuerpo', reflexiona Catalina Suescún, quien en la actualidad dicta la conferencia ‘Alicia y yo’, en la que por medio de su testimonio concientiza a las personas sobre las precauciones y la prevención del cáncer de seno.
'Para mí, mi familia fue como un equipo de fútbol, siempre estuvieron todos unidos, me acompañaban y protegían de cualquier cosa que pudiera afectarme', finaliza Catalina sobre la enfermedad que padeció por varios meses y que hoy recuerda como 'la experiencia más gratificante de su vida'.
Actividades en Barranquilla
En el marco de la conmemoración del Día Internacional del Cáncer de Seno, la Liga de Lucha Contra el Cáncer, sede Barranquilla, tiene organizadas hoy una serie de actividades en torno a combatir esta enfermedad.
A partir de las 8:00 de la mañana se realizará el evento ‘La Imagen de la Campaña’, donde la chef Nancy Cabrera compartirá su testimonio con los asistentes.
Seguido, la instructora de zumba Gaby Arévalo Silva, quien también sufrió de cáncer, dictará una sesión de zumba a las mujeres mastectomizadas de la Liga, Pacientes y Empleados de la Institución que participen de la actividad.
La superviviente de cáncer Gloria Latorre Vergel, por su parte, dará a las asistentes el curso ‘Artesanal de Pulseras’.
