Desde su arribo a Barranquilla -la pasada tarde del lunes- la familia Piqué Mebarak ha mantenido paralizada a la ciudad. Es la primera vez que Shakira visita su tierra natal con su esposo, el futbolista Gerard Piqué, y sus dos hijos Milan y Sasha. Y ayer fue el día elegido para conocerla.
En horas de la mañana se abrieron las puertas del edificio Bellagio –ubicado en la carrera 56 con calle 79, frente al parque Rosado–, donde viven los padres de la barranquillera y donde se aloja con su familia, para comenzar el primer paseo que tendrían los pequeños por la ciudad.
Luego de recoger a sus abuelos, Montserrat Bernabeu y Joan Piqué (padres del jugador), en el hotel Four Points donde se encuentran hospedados, los niños de 3 y 1 año de edad fueron a jugar en un parque al norte de Barranquilla. Acompañado de su tío, Milan manejó monopatín alrededor del parque, mientras Sasha era mecido en un columpio por sus abuelos.