Las artes que desde hace 15 años se toman la sede Ay Macondo durante los cuatro días de Carnavales llegan recargadas este año con una agenda previa al evento central. Desde Córdoba la banda Los hijos del río Sinú, con Milena Antolínez como invitada, y el grupo de danza Fandango Candela inician hoy una Precarnavalada, desde las ocho de la noche, con un aporte de $15 mil.
Como ya es tradición, el frente de la Casa Moreu –ubicada en la calle 68 No. 62-27– se transforma los días antes del miércoles de ceniza. La vía se convierte en pista de baile, el bulevar en gradas y la terraza de la sede de Ay Macondo se despliega como escenario. Teatro, show de payasos, malabarismo, música, letanías, danzas y, en general, manifestaciones artísticas contemporáneas se encuentran en este espacio cultural alterno a las tradicionales actividades del Carnaval, este año a realizarse del 25 al 28 de febrero.
Pero este 2017 trae una innovación, la programación se extiende a un mes antes de la fiesta. Hoy y los próximos cuatro sábados antes del Carnaval las luces se encienden y el telón se abre con una programación de danzas y música dentro de la Casa Moreu, adecuada con mesas y sillas y una especie de cafetería para posicionarse como un lugar de encuentros durante todo el año.
'Este 2017 cumplimos 16 años de realizar la Carnavalada al aire libre. Pero la idea de la Asociación Cultural Ay Macondo es mantener una programación permanente tanto de Carnaval como de cultura y artes. Entonces decidimos comenzar con la Precarnavalada, que serán cinco días de baile. Comenzamos el viernes porque el sábado es la Lectura del Bando', explica Darío Moreu, director de Ay Macondo.
El primer día la agenda está dedicada a resaltar las Fiestas del 20 de enero que se llevan a cabo en Sincelejo. Por eso la lista musical estará dedicada a sus ritmos autóctonos: porro, chandé, chalupa, fandango, y a los del Carnaval de Barranquilla.
Nuevo centro cultural. Esta fiesta cultural tiene un propósito más grande y paralelo –pero no igual– al de la Carnavalada. La idea de los organizadores es crear en la Casa Moreu un centro cultural que sea un nuevo lugar de encuentro para la ciudad, en el que las personas puedan vivir las artes mientras comen, beben y bailan. En este caso, haciendo gala a la época, la programación es de Carnaval, pero en un futuro cualquier expresión artística será bienvenida.
'Hemos adecuado el espacio que va a funcionar como una sala alterna de programación cultural mensualmente en Barranquilla. Donde también funcione un restaurante, para ofrecer a la gente un plan integral: que puedan venir a comer y tomar algo mientras asisten a una muestra cultural', señala Mabel Pizarro, de Ay Macondo.
La intención, entonces, es abrirle campo a las artes en la ciudad, y a los grupos locales y nacionales para que exploren y muestren su potencia; que sea accesible a todo público. De esta forma, rescatar la cultura como alimento espiritual, como espacio de convivencia y tolerancia, como fomento de paz desde las artes. O así lo definen sus creadores.
