Presentaciones musicales, puestas en escena, zonas de lectura, talleres artísticos y otras actividades de recreación se convirtieron en el centro de atención de los cientos de niños que se reunieron en los jardines del Teatro Amira de la Rosa para participar de la décima edición de Fantástico, el espacio infantil del Carnaval Internacional de las Artes.
La propuesta musical estuvo a cargo de artistas como la agrupación nominada al Grammy Latino, Tu Rockcito; el Rey infantil de la Leyenda Vallenata, Santi Molina; las melodías del musicoterapeuta Juan Pablo Ruiz, entre otros.
'La música tiene un altísimo poder en la fisiología y las emociones en el ser humano, y estos efectos son medibles. Así que se pueden usar en pro del desarrollo de los niños', afirma el músico Ruiz, quien se ha caracterizado por trabajar en el bienestar de pequeños con autismo, síndrome de Down, Tourette, Asperger y con problemas escolares.
En este evento, Ruiz se encargó de presentarles a sus espectadores una intervención que tiene como eje la composición. 'Se componen canciones dirigidas a los niños con el objetivo de que cada tema sea una herramienta de vida que les ayude en su deambular por la vida y en los acontecimientos rutinarios', explica.
Por otro lado, puestas en escena como la del clown italiano Otto Il Bassotto, mejor conocido como el hombre de goma, y la de la ilusionista y escapista Karry Lizeth, de 19 años, cautivaron la atención de los pequeños asistentes, quienes se mostraron muy participativos en cada una de las actividades del festival.
También hubo un espacio para concientizar sobre la importancia de cuidar el medio ambiente. El colectivo artístico UMS distrital de Bogotá fue el encargado de desarrollar un laboratorio de reciclaje donde los niños aprendieron a reutilizar los materiales cotidianos, como CD, botellas, tapas y pedazos de tela, con el fin de crear sus propios juguetes. 'Este año quisimos representar algunas figuras representativas del Carnaval de Barranquilla, e hicimos una marimonda elaborada con CD. Definitivamente, una actividad muy divertida', considera Nicolás Castro, miembro del grupo de arte.
Los padres fueron otros de los asistentes que disfrutaron de este evento. Según Astrid Aricharico, quien tiene un niño de 2 años, el festival fue 'un centro de recreación donde los niños aprendieron a relacionarse con los demás y a ver actividades de arte que cotidianamente no experimentan'.
Para Milena Thinkan, productora del evento, el propósito del festival es estimular la imaginación, creación y el amor por el arte. 'Desde el Carnaval se puede fortalecer todos estos ámbitos', concluye.