La melodía de El evangelio, en gaitas y guitarra con toques urbanos, capturó la atención de los periodistas.
El grupo habló sobre su propuesta musical que es una interpretación contemporánea de la gaita, un instrumento arraigado a la tradición Caribe.
'Nosotros lo que hicimos fue recontextualizar la gaita como una alternativa de las nuevas sonoridades', explicó Leang Manjarrés.
Leang Manjarrés explica que la interpretación que hace Bozá de la gaita se nutre del entorno actual de Barranquilla.
'Los juglares dicen que cuando se toca la gaita tradicional, que viene de toda la sabana, debe oler a hierva mojada, al campo. Ninguna de esas cosas las tenemos en nuestro contexto, por eso cuando interpretamos esta gaita urbana tenemos el ruido de los carros, la influencia de la academia, la sonoridad de la flauta traversa, eso hace que tengamos una sonoridad distinta al tocar este instrumento'.
Para Jorge 'Salpi' Guerrero, guitarrista de la banda, la propuesta musical pone a dialogar las melodías de las gaitas con la guitarra, un instrumento de la escena popular.
'La idea de la guitarra es lograr interpretar la música del Caribe y hacer que el sonido de las cuerdas lleven el alma de la música sin que esté presente la percusión del formato tradicional. Eso es lo que queremos lograr', explica el músico.
La otra gaita de Bozá es Ailan Manjarrés quien aclara que para llegar al punto de transformar la sonoridad del instrumento fue necesario aprender de los juglares.
'Para poder evolucionar tuvimos que aprender primero de los maestros de la gaita tradicional en Festivales como el de Ovejas, Sucre. Al principio estábamos temerosos de que los maestros se sintieran ofendidos con la propuesta de la nueva gaita, pero para nuestra sorpresa hemos recibido su apoyo', afirma.