Para su cuarta edición, el Festival Internacional de Cine por los Derechos Humanos Bogotá le apuesta a Barranquilla como sede del evento, que se realizará en la ciudad del 15 al 17 de agosto, luego de ser uno de los lugares en donde se hizo una muestra itinerante el año pasado.
Esta iniciativa, que nació en 2013 en la capital colombiana, ha ido agregando cada año nuevas ciudades para la expansión de su programación que busca, en últimas, generar espacios de diálogo en torno a la vida, la reconciliación, la promoción y defensa de los derechos humanos, y a la construcción de ideas para la paz.
Para su productora en Barranquilla, Kathy Liñan Ching, 'este año el festival va a ser mucho más grande porque durará una semana –en Bogotá y Medellín va del 11 al 18 de agosto–, y tendrá presencia en cuatro ciudades principales'.
Este proyecto busca convertirse en un punto focal para la comunidad fílmica, tanto nacional como internacional, que generan contenidos audiovisuales enfocados en los derechos humanos. 'Queríamos hacer no un festival protestante, pero si denunciante. Que mire las realidades de todo lo que se vive en el país y en muchas partes del mundo', manifestó Liñan.
Además, explicó que le apuntaron desde un principio al formato audiovisual porque entienden el cine como 'una forma directa para ver y escuchar las realidades de otros mundos'.
A su vez, el evento se convierte en una plataforma para la promoción, circulación, distribución y exhibición de obras audiovisuales que, debido a contar temas que no son comerciales, cuentan con pocos espacios para su difusión.
