Estuvo a punto de convertirse en beisbolista profesional, pero una decisión cambió el curso de su vida de forma drástica. Ya había optado por elegir la música sobre el deporte de la pelota caliente, entonces debía afrontar su decisión y conseguir sus objetivos.
Eddy Herrera tenía tres opciones: ser beisbolista, arquitecto o cantante, y fue la tercera alternativa su elección.
Un sábado, a los 17 años, tenía la cita para que lo firmaran con el fin de hacer parte de las ligas menores de los Cachorros de Chicago, pero a la misma hora debía ir a un ensayo para ajustar detalles de lo que sería una presentación en el Festival de la Voz en Santiago de los Caballeros, República Dominicana. Tenía dos caminos: a la derecha estaba el estadio donde lo esperaban los empresarios que lo firmarían y a la izquierda el Politécnico, el lugar donde era el concierto.
Giró a la izquierda, cantó con más fuerza que nunca y ganó el festival. Gracias a que obtuvo el primer puesto ingresó a estudiar arquitectura en la universidad y hacer gira en la televisión nacional. 'Wilfrido me vio en televisión cantando baladas, fue a mi casa a conocerme y me dijo: 'papi, te quiero en mi banda, papi', recuerda el merenguero en diálogo con EL HERALDO.
Ese momento fue crucial. Su elección determinó que forjara una de las carreras más estables del merengue y que haya consolidado éxitos a nivel internacional. Con Wilfrido Vargas inmortalizó un sinnúmero de canciones y como solista tiene una lista interminable de temas que ponen a bailar a los seguidores de su música.
Hoy, con más de 25 años de carrera artística y casi seis años después de haber lanzado su última producción musical titulada ‘Viviendo al tiempo’, regresa con su disco número 13 llamado A otro nivel.
'Hay una canción que se llama Otro nivel y trata de una muchacha que me tiene enloquecido. Ella está en otro nivel, en otro nivel, en otro level estoy loco por usted. Es uno de los power de mi disco. Está fusionado con el mundo urbano y tiene elementos de reguetón en 30% y 70% merengue', dice Herrera.
Eddy Herrera está 'a otro nivel'. Sin embargo, afirma que le gusta hacer las cosas con tiempo y sin prisa. 'Quiero más, pero voy con calma. Me gusta hacer las cosas con calma, paso a paso y escalón por escalón. Quiero arrancar con el pie derecho y que todo sea a su tiempo. Así ha sido mi vida musical, espiritual. Este disco duré dos años haciéndolo, nadie me está esperando'.
Esta nueva producción discográfica viene con 13 canciones, de las cuales hay 12 merengues con arreglos en los que se destacan fusiones tropicales y una versión balada del tema Para toda la vida. El lanzamiento del disco lo hizo primero en Colombia y destaca que 'amo Barranquilla, venir aquí es como estar en mi casa. Tengo grandes amigos acá y definitivamente esta ciudad es muy importante para mí'.
Eddy Herrera hará próximamente un disco en México que será tributo a Javier Solís, uno de los más grandes exponentes del bolero ranchero.