Contar el cuento no es tan fácil como pararse en un lugar a hablar y hablar. Llegarle al otro y tocarle fibras, sacarle una sonrisa y dos segundos después hacerlo llorar con una frase, hace que este arte siga creciendo para atrapar más almas necesitadas de historias, como esas que se cuentan en El Caribe Cuenta.
Este año, el festival cumple dos décadas 'manteniendo viva la tradición oral de la región'. Para ello, la ‘fiesta de las palabras’, como se le conoce, celebrará, del 27 de agosto al 3 de septiembre, en Barranquilla, San Andrés, Galapa y varios municipios del Atlántico su natalicio con performances en los que los protagonistas serán los cuentos, mitos ancestrales, leyendas, puestas en escena de historias acompañadas de música y pintura, organizado por la fundación Luneta 50.
'Nos da mucha alegría que sean 20 años de El Caribe Cuenta, sobre todo porque es un evento cultural en una ciudad como Barranquilla, en la que es más significativo por el sostenimiento que ha tenido en el tiempo de un proyecto cultural autogestionado y con el respaldo de instituciones que se interesan en la ciudad por un evento como este', dijo Zoila Sotomayor, directora ejecutiva de Luneta 50.
Esta celebración estará enmarcada por la participación de narradores de Argelia, Francia, Chile, Cuba, Bolivia, Venezuela y Colombia. Sus actuaciones se realizarán en las salas de teatro alternativas de la ciudad, lideradas por artistas y gestores culturales.
'Las funciones se harán en la fundación Luneta 50 con el objetivo de tener un espacio alternativo para el desarrollo de las artes, con el fin de que los artistas encuentren un espacio cálido y acogedor donde mostrar su trabajo. Como esta, hay otras salas alternativas en Barranquilla como ¡Ay Macondo!, el Teatro La Sala y la sala Onomá, en el barrio San Felipe', añadió Sotomayor.
En esta edición, el festival es in memoriam de Aníbal Tobón, 'un artista multifacético que le tocó el corazón y el cerebro a muchísimos artistas locales'