Sin planear hacer algo en conjunto, los artistas Carla Celia y Joaquín Botero terminaron armando juntos una exposición llamada ‘En-caja-2’, en donde combinan el trabajo de ambos, que tiene como punto en común el uso de cajas. La muestra se inaugura el miércoles en la Galería de la Aduana, a las 7:00 p.m.
Contaron que todo nació como algo espontáneo, pues cada uno de ellos venía trabajando en un producto artístico propio, pero querían exponer juntos. '¿Qué teníamos de elementos en común? Las cajas. Básicamente se trata de que la persona mire lo que está adentro de la caja y que la caja se convierta, a su vez, en parte de la obra de arte', precisó Celia.
Las obras juntas tienen además una propuesta estética, que aunque no fue planeada, funciona al combinar el minimalismo de Botero con la explosión de elementos de Celia; los tonos neutros de una obra con el colorido de la otra; la teatralidad y puesta en escena; con los altares y la iconografía de la cultura popular. En conjunto, una alternación de opuestos que están ‘En-caja-2’.
Arte popular
Carla Celia manifestó que viene en un proceso de reestructuración como artista que la empujó a buscar nuevas formas para expresarse más allá del lienzo, que era su medio usual. En su búsqueda se reencontró con los altares populares, con los cuales había trabajado hace unos 10 años. 'A mí el arte popular siempre me ha llamado muchísimo la atención, la iconografía, el voltear el significado de las cosas', aseguró.
Además explicó que su idea es 'dentro del colorido que identifica a la Región Caribe, tomar estos elementos de la cultura popular y transformarlos para convertirlos en una obra de arte', a la vez que aclaró que los íconos religiosos no los transforma a modo de sátira, sino como homenaje por el fervor que despiertan.