En el Teatro Axis del Hotel Planet Hollywood de Las Vegas la tensión era palpable instantes antes de conocer el nombre de la sucesora de la francesa Iris Mittenaere en el trono universal. Mientras la sudáfricana Demi Leigh Nel -Peters y la colombiana Laura González se tomaban de las manos con un nerviosismo evidente, los espectadores de la gala, casi paralizados, esperaban escuchar el veredicto final de los jurados, el presentador Steve Harvey anunció el nombre de la más bella del mundo. La representante de Sudáfrica se llevó la corona de Miss Universo, quedándose la cartagenera con el segundo lugar.
De nuevo, por sexta ocasión en la historia del país, Colombia logró el virreinato en el más importante certamen de belleza que, aunque ha disminuido su popularidad con respecto a años anteriores, sigue siendo el más visto del mundo.
Hace 59 años, en 1958, Colombia proclamó a su primera Miss Universo, Luz Marina Zuluaga. El país no volvió a tener protagonismo sino 34 años después con la aparición de la primera virreina universal Paola Turbay, quien en 1992 ocupó el segundo lugar en este certamen, siendo la primera de las tres veces consecutivas que una colombiana quedaría de virreina.
Un año después, el turno fue para la paisa Paula Andrea Betancourt y luego para la caleña Carolina Gómez.
Tras una larga ausencia de las colombianas como figuras centrales del certamen, Taliana Vargas rompió esa racha con otro virreinato. Aunque en opinión de muchos la corona del 2008 le pertenecía a la samaria, los jurados eligieron a la venezolana Dayana Mendoza.
En el 2014, luego de estar tantas veces tan cerca, Colombia conquistó nuevamente el título de la mujer más bella del mundo, 56 años después de Luz Marina Zuluaga, en cabeza de la carismática Paulina Vega Dieppa.
