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¿Exportar café a Dinamarca? ¿Reciclar sus residuos? ¿Cosméticos a base de café? Preguntas a las que tres jóvenes barranquilleros les encontraron una respuesta llamada Kaffe Bueno, una compañía basada en la economía circular.

Alejandro Franco, de 23 años; Camilo Fernández, de 22 y Juan Pablo Medina, de 24, estudiaron Negocios Internacionales en Londres y allí se conocieron.

'Estudiamos con muchos suecos y nos dimos cuenta de que les gustaba mucho el café, siempre lo tomábamos y hablábamos del tema', cuentan sobre cómo surgió la idea de Kaffe Bueno.

Tras un viaje a Colombia decidieron llevarles muestras del producto colombiano. 'Comenzamos a investigar y nos dimos cuenta de que era un mercado muy grande y que estaba dispuesto a pagar por un café de muy buena calidad. Pero no queríamos ser la compañía que compraba el café a los caficultores sino montar proyectos sociales, sostenibles y que ayuden al ambiente'.

Recientemente estes tres jóvenes obtuvieron un reconocimiento de 50 mil coronas en los premios de innovación otorgados por Agro Business Park.

Ellos encontraron el valor en el residuo del café 'aprovechando que Dinamarca es la capital del reciclaje'.

Analizaron los restos del grano, específicamente el aceite que después del consumo 'sigue intacto'. Dieron con que este elemento es beneficioso para la piel, por lo que su próximo reto será el tema cosmético.

En los últimos seis meses han reciclado los residuos, lo llevan al Instituto Tecnológico a extraer el aceite y en Suecia lo combinan con otros ingredientes. En enero empezarán las pruebas de los primeros cinco productos.

No dudan en decir que lo que más extrañan de Colombia es la familia y la comida, pero estar lejos de casa les permitió ‘vender’ la imagen a través del café, de lo que se hace en el país e incluso convertirse en expertos en la materia.

'Irónicamente nos volvimos amantes del café viviendo por fuera del país', confiesan.

Trabajan con fincas cafeteras que han sido afectadas por el conflicto, indígenas kankuamos de la Sierra Nevada y caficultores de Huila y Tolima. 'No es solo comprar un buen producto, es hacerlo a una marca que contribuya a los valores'.

En su tiempo libre el café también toma protagonismo: cócteles, cervezas y demás bebidas a base de este grano han sido su fuerte.

Por ahora disfrutan unos días de su ciudad para llegar recargados en el 2018 a apoyar a los campesinos nacionales e innovar con la mejor representación de Colombia a nivel mundial: el café.