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Apenas unos días después de la condena del actor Bill Cosby, el movimiento contra el abuso y la agresión sexual Time's Up urgió en el comienzo de esta semana a la industria de la música a castigar a la estrella de R&B R. Kelly.

El cantante de voz aterciopelada, autor de varios éxitos como I Believe I Can Fly, enfrenta varias denuncias de maltrato de adolescentes y mujeres jóvenes.

La sección Mujeres de Color de Time's Up aseguró que la condena del actor Cosby por una agresión sexual cometida hace 14 años 'es solo un comienzo' y pidió 'a personas de todas partes que se unan' a ellas 'para insistir en un mundo en el cual mujeres de todos los tipos puedan perseguir sus sueños libres de toda conducta depredadora, abuso y agresión sexual'.

El movimiento inició una campaña titulada #MuteRKelly, y reclamó al sello del cantante así como a los servicios de streaming Spotify y Apple Music que retiren sus canciones de sus contenidos. También pidieron al Greensboro Coliseum de Carolina del Norte que cancele un concierto del artista previsto allí el 11 de mayo.

'Pedimos investigaciones apropiadas de las denuncias de abusos de R. Kelly realizadas por mujeres de color y sus familias durante más de dos décadas', dijo la sección Mujeres de Color de Time's Up en un comunicado.

La participación del cantante en un concierto en la Universidad de Illinois, en Chicago, ya fue anulada luego de una campaña que circuló una petición al respecto.

Kelly, nativo de Chicago y que vive parcialmente en la Trump Tower de esa ciudad, pidió perdón a sus fans por no poder presentarse ante ellos.

'Nunca escuché que un show fuese cancelado debido a rumores. Pero supongo que hay una primera vez para todo', dijo en un video publicado en su cuenta Instagram.

Kelly, de 51 años, fue absuelto en 2008 de cargos de pornografía infantil luego de que el diario Chicago Sun-Times publicase un video que supuestamente lo mostraba en actos sexuales con una menor de edad.

El año pasado, BuzzFeed News informó que Kelly mantenía a seis mujeres prácticamente como esclavas, con poder sobre la ropa que vestían, lo que comían y sus encuentros sexuales, al parecer filmados.

El cantante ha negado todas las acusaciones en su contra. En 2017 dijo que estaba 'alarmado y perturbado' por las informaciones sobre su presunta secta sexual.