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Un aparente ‘error’ de protocolo protagonizó la duquesa de Sussex, Meghan Markle, cuando asistió junto a la reina Isabel II a su primer evento público, sin la compañía del príncipe Harry.

Luego de presenciar una presentación de niños en el museo de Catalyst debido a la inauguración del puente Mersey Getaway, en Cheshire, Inglaterra. Ambas mujeres se dirigieron al auto para partir del evento, sin embargo ocurrió una inusual situación.

Meghan subió primero que la soberana al auto, acción no permitida según el protocolo, debido a que la reina debe de ser primero. Sin embargo, en este caso y bajo petición de la reina algunas cosas se deben de realizar según su preferencia.

Esta vez, la reina quería sentarse en su puesto del auto preferido, detrás del conductor, por lo que le correspondió a Meghan entrar primero. Aparentemente se rompió el protocolo, sin embargo el consentimiento de la reina fue primordial.