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¿Cuántos pequeños sueñan al ver películas con construir robots? Más que una ilusión, aterrizarlo a la cotidianidad y aportar a problemáticas de su entorno es lo que lograron unos pequeños guajiros.

El equipo Coalbots, del colegio Albania de La Guajira, integrado por Juan Camilo Molina, Luis Felipe Ponce, Diana Verdeza, Elián Lamus, Manuel Franco, Juan David Rodríguez, Alberto Gutiérrez y David Ceballos, junto a su entrenador, Iván Guzmán, lograron conquistar un premio de robótica en Estonia. 

Participaron 98 equipos de 57 países y con el Purificador de agua 360° consiguieron el galardón Inspiration del First Lego League Estonian Open International, celebrado en Tallin del 6 al 8 de junio.

Ellos cumplieron cada requisito que planteaba la competencia, desde construir un robot autónomo que complete misiones pre-diseñadas, hasta analizar, investigar e inventar una solución para el desafío y crear una presentación inteligente acerca de la solución exponiéndola ante los jueces.

La organización internacional First (For Inspiration and Recognition of Science and Technology), promueve todos los años, en distintos países del mundo, una serie de torneos de robótica para niños entre los 9 y 16 años. Su finalidad es reforzar valores que inspiran a crear elementos científicos y tecnológicos retando la creatividad de cada pequeño. 

En este caso el proyecto PA 360° tenía como objetivo permitir el suministro de un mínimo vital de agua sanitariamente aceptable para las comunidades de la región de donde son a través de un sistema de destilación solar modificado.

Lo anterior se da aprovechando las condiciones naturales de La Guajira como lo son la radiación solar, la poca nubosidad y las precipitaciones. Con esto se purifica el agua que se extrae de pozos y se les da las condiciones de salubridad.

Estos pequeños estudiantes contaron con el apoyo de la Fundación Cerrejón y los funcionarios de la Planta de Calidad de Agua de Cerrejón para aprender de los procesos y al final fueron los expertos los que reconocieron la viabilidad del proyecto que compitió y dejó el alto el nombre de La Guajira y la ciencia desarrollada en nuestro país en Estonia.