El anuncio del casamiento, mantenido en secreto hasta el último momento, entre un actor judío israelí y una presentadora de televisión árabe israelí desató pasiones en Israel, donde se mezclaban las condenas y los buenos deseos. Lucy Aharish, procedente de una familia musulmana y primera árabe que presenta un programa en hebreo en la televisión israelí; y Tsahi Halevi, actor en la exitosa serie de televisión Fauda, se casaron el miércoles en una ceremonia revelada por los medios la madrugada de ayer.
Los recién casados, de 37 y 43 años, respectivamente, y que llevan varios años como pareja, querían que su casamiento se celebrara en secreto por el temor a las 'reacciones de los extremistas'.
El ministro del Interior israelí, el ultraortodoxo Arie Déry, consideró ayer en una emisora de radio militar que este matrimonio 'no es algo bueno', y expresó su preocupación por sus futuros hijos, invitando a la esposa a convertirse al judaísmo. También aludió a los estragos de 'la asimilación que consume al pueblo judío'.
Por su parte, el diputado Oren Hazan, consideró en Twitter que Lucy Aharish 'sedujo a un judío con el objetivo de debilitar' al país e 'impedir que los descendientes judíos continúen con la dinastía'.
Estas declaraciones motivaron una ola de apoyo a los recién casados.
'Enhorabuena y felicidad a esta magnífica pareja', declaró en Twitter la diputada laborista Shelly Yachimovich.
La diputada de centro-derecha Meirav Ben Ari también felicitó a la pareja con un 'Mabruk' ('Enhorabuena', en árabe).
Lucy Aharish es una mujer árabe con ciudadanía israelí. Los árabes israelíes representan 17,5% de la población del país.
La serie Fauda, en la que trabaja Tsahi Halevi, ha logrado éxito internacional al representar de manera brutal el conflicto israelo-palestino y dando, según los críticos, una dimensión humana a todos los personajes, tanto israelíes como palestinos.