En redes sociales la controversia no ha cesado por la participación de la candidata de España, Ángela Ponce, en Miss Universo. Desde su designación, la primera concursante trans del certamen ha sido blanco de un sinnúmero de críticas y comentarios a favor que reavivaron la polémica sobre si debe o no participar una mujer trans en el mayor evento universal de la belleza femenina.
Hace varias semanas, la señorita Colombia, Valeria Morales, quien se proclamó ganadora el pasado 30 de septiembre del Concurso Nacional de Belleza en el certamen Rumbo a Miss Universo, vigorizó el debate tras criticar a su compañera española.
'Creo que un reinado de belleza, como es Miss Universo, es para mujeres que nacimos mujeres. Y creo que para ella también sería una desventaja, así que hay que respetarla, pero no compartirlo', dijo en una entrevista.
Por su parte Ángela le respondió a través de su cuenta de Instagram. 'Yo sí la respeto y respeto que esa sea su opinión, pero no quiero llegar a Miss Universo con ningún prejuicio hacia ella ni hacia ninguna otra compañera, quiero vivir una bonita experiencia y si ella quiere, dejarme conocer, así como yo quiero conocerla a ella', publicó.
Ponce pidió además respeto tanto para ella como para Valeria, debido a la ola de comentarios que se desataron con ocasión del desacuerdo.
'Nunca trataré de cambiar su opinión pues esa no es mi función. Mi finalidad es dar a conocer mi realidad y hablarle al mundo un poco sobre la educación en la diversidad que es tan escasa, un factor importante y que sin duda terminaría con tanto bullying, prejuicios y violencia', agregó en su cuenta.
La organización de Miss Universo tomó la decisión histórica en 2012 de permitir la participación de mujeres transgénero y transexuales en el concurso. Sin embargo, seis años después de eliminar esa brecha de género de los estatutos, por primera vez una mujer que nació biológicamente hombre podrá competir para llevarse la corona que la designa como la más bella del mundo.