'Pase y pregunte por lo que no vea', le dijo a sus clientes Gabriel Rojas, un entusiasta comerciante que hace más de 30 años atiende su negocio de ropa en el centro de la ciudad.
Su esposa, Mónica Candela, vestía una camisa amarilla, idéntica a la suya para mostrarle a sus clientes cómo se verían usando el estampado de flores y plantas, 'una de las tendencias de la temporada'.
'Lo que necesite se le tiene', pregonó Gabriel dejando al descubierto un acento muy currambero.
Desde las primeras horas de 2019, canciones como La Rama De Tamarindo, de Juan Piña, Coroncoro de la Niña Emilia y Checumbia, del Checo Acosta ya inundaban la radio. Y es que cuando diciembre se acaba, Barranquilla de inmediato se pone en modo Carnaval.
Así las cosas la agenda de las fiestas cada día se hace más apretada, porque lo bueno del precarnaval apenas empieza.
Precisamente esta proximidad con los eventos activó también diversos sectores del comercio, entre ellos, la moda y las artesanías.
