La Semana Santa es vista por algunos como una época de vacaciones y esparcimiento, un alto a la rutina académica y laboral. Para otros es un símbolo de reflexión en el que se conmemora, según la fe cristiana, la pasión, muerte y resurrección de Cristo.
Por este motivo los templos de todo el mundo abren sus puertas a la celebración católica. En Barranquilla, cientos de fieles concurren año tras año a sus parroquias para vivir este encuentro religioso.
Con el Jueves Santo se inicia el Triduo Pascual, una temporada que termina con la resurrección de Jesús y el fin del año litúrgico.
Hoy, la Iglesia evoca, como lo hace anualmente, la Eucaristía en la Última Cena y el lavatorio de pies realizado por Jesús a sus discípulos antes de ser arrestado y posteriormente crucificado.
Las parroquias de la ciudad ponen a disposición de los feligreses su programación durante los días de la Semana Santa, tiempo que marca el fin de la Cuaresma y el comienzo de la Pascua.
La iglesia San Nicolás de Tolentino, la Inmaculada Concepción, la Catedral María Reina, Nuestra Señora de la Caridad del Cobre y la parroquia Espíritu Santo son solo algunos de los templos que se suman a la celebración bíblica.