Es la primera vez que llega a Colombia. Tiene una camisa blanca, jeans oscuros y sandalias, su cabello es corto y usa gafas. Tiene 21 años y está sentada en un sofá frente a un auditorio lleno de jóvenes, algunos mayores que ella por un par de años y otros acercándose a su edad. Es Adora Svitak, una activista estadounidense, escritora y conferencista, ante los estudiantes de la Universidad del Norte, en Barranquilla.
'Solo he estado un día, no sé si haya visto suficiente', dice luego en diálogo con EL HERALDO. Solo ha podido ver la ciudad por la ventana del carro y analizar a algunos estudiantes de la universidad; sin embargo, bastó esa charla con ellos el pasado viernes para decir que le emocionó mucho 'la pasión por las ideas que tienen los estudiantes y la forma en la que están tan informados del mundo'.
De Adora se puede decir que busca el empoderamiento de los jóvenes y la alfabetización. Es considerada una niña prodigio. A los 8 años publicó su primer libro Flying Fingers. Se trata de un compilado de 300 cuentos cortos después de haber sido rechazado por múltiples editoriales, pero que, cuenta, fue esa ingenuidad y determinación propia de la niñez lo que permitió que al final pudiera ser un éxito.
Es precisamente esa actitud de los niños y jóvenes que, cuenta en sus charlas, deben adoptar los adultos. Y es de esa generación a la que pertenece, la centennial, de la que habla desde una perspectiva de cambio.