Compartir:

Un año después de la muerte de su superestrella, el DJ sueco Avicii, la escena de la música dance electrónica se interroga sobre su ‘genética’ frente a un hip hop que se ha convertido en el rey de las fiestas en las grandes capitales del mundo.

Los miembros de un género antes underground y sobre todo asociado a las fiestas rave exploran nuevos horizontes, con actuaciones que asocian instrumentos tradicionales, para seguir haciendo vibrar al público en la era posterior al dominio del dance electrónico, o EDM.

El prodigio sueco Avicii, que se suicidó en Omán en abril de 2018 a los 28 años, fue uno de los primeros en popularizar este tipo de género, actuando en festivales repletos de gente y colaborando con estrellas de la música pop como Madonna y Coldplay.

Su muerte dejó huérfano al mundo del dance, como en su tiempo Kurt Cobain, motor de la escena grunge con su grupo Nirvana, dejó un gran vacío al quitarse la vida a los 27 años.

Avicii mismo había alertado sobre un posible desgaste del EDM, género que reagrupa estilos tan variados como el house, el tecno, el trance o el dubstep.

'Es importante que siga evolucionando para que no se convierta en moda', dijo una vez al London Evening Standard.

Ahora muchos de sus contemporáneos están reemplazando los ritmos de alta intensidad y frenéticos por un trabajo más experimental.

El dúo canadiense Bob Moses, integrado por Tom Howie y Jimmy Vallance, combina música electrónica con instrumentos en vivo y voces robustas para desarrollar un estilo rock-electro. Dejaron atrás los galpones donde crecieron tocando y ahora participan en grandes festivales como Coachella o el New York's Governors Ball.

'Cuando comenzamos juntos en esa época y en esos lugares —que era Brooklyn como en 2012— todo era música dance underground y raves en galpones', dijo Howie.

'Eso era como super punk rock; super nuevo y excitante'.

Pero la llegada de la EDM a la cultura dominante abrió nuevos caminos para el dúo y eso los llevó a experimentar con guitarras y micrófonos en las cabinas de DJ para crear un sonido de fusión. Y valorizar las letras de sus canciones les permitió seducir a un público más amplio, dice Vallance.