Crash Team Racing regresó a toda máquina, dando de qué hablar en todo el mundo de los videojuegos. La relanzada sensación de las carreras, en donde sus protagonistas se suben a veloces karts y recorren alocadas pistas, estrenó en Nintendo Switch, PlayStation 4 y Xbox One apuntándole no solo a la nostalgia, sino a un futuro brillante y electrizante.
Cuando el original Crash Team Racing salió publicado en octubre de 1999 sus primeros fanáticos llenaron de elogios a un videojuego que le compitió directamente a Super Mario Kart, el primer titán del género.
En aquel entonces, la batalla era entre el Nintendo 64 y el PlayStation 1, las consolas de vanguardia de esa época. Los jugadores, por su parte, dividieron sus opiniones entre ambos títulos, disfrutando en los dos un mundo colorido y lleno de velocidad.
20 años después, Crash Team Racing, originalmente publicado por Naughty Dog, responsable de otros grandes títulos como las sagas de Uncharted y The Last Of Us, volvió al ruedo, esta vez desarrollado por Beenox, quienes superaron las expectativas en una versión remasterizada digna de competir en el mercado actual.
Crash y sus amigos, enemigos y locos compañeros volvieron a las consolas más modernas luego del lanzamiento de la Insane Trilogy de Crash Bandicoot, uno de los videojuegos de plataformas más aclamados de los últimos años. En esta oportunidad, el turno fue para el título de carreras, en donde el enemigo no es Cortex sino un alienígena invasor.
Como en el juego clásico, un invasor espacial amenaza a Crash y a sus colegas competidores con destruir la tierra y convertirla en un enorme parqueadero de cemento, a menos que lo derroten en una carrera frenética. Con esta misión en el horizonte, el jugador deberá encarnar a Bandicoot o a otros corredores para derrotar a este enemigo alienígena.
El nivel gráfico de Crash Team Racing, conocido por sus siglas CTR, es de muy alta calidad, siendo una representación casi exacta de las mismas pistas y personajes que incluía el título original de PlayStation 1. En esta ocasión, la presentación del videojuego es digna de la nueva generación de consolas y es grato llenarse de nostalgia al visitar nuevamente un juego tan popular entre los amantes del género.
Un regreso
Con sus diferentes modos, entre los que se encuentran la aventura principal, las carreras entre amigos a nivel local y en linea o las batallas, el juego ofrece cientos de horas de diversión y entretenimiento, a costa de un nivel medio-alto de dificultad, como lo fue también el videojuego original.
Los controles, calcados de la época de PlayStation 1, se sienten más intuitivos y completos que en la versión antigua y se integran perfectamente con lo frenético de las carreras y lo veloz de sus vehículos.
Además, el videojuego ofrece la posibilidad de cambiar algunos botones para así hacer más personalizable la experiencia del jugador.
En cuanto a la jugabilidad, Crash Team Racing es una oportunidad única, pues ofrece lo mejor del pasado con la tecnología de último momento, entregando una experiencia no solo nostálgica y para recordar épocas pasadas, sino para sumergirse en su universo como si fuera un videojuego completamente nuevo.
Una de sus mayores ventajas es que, a diferencia de muchos otros juegos de los últimos años, no incluye ningún tipo de micro transacciones, permitiendo que los jugadores adquieran las mejoras estéticas para sus personajes y los karts sin ningún tipo de costo en el mundo real.