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Seis meses de embarazo tenía Lina Rodríguez cuando se aventuró, por primera vez, a cantar y tocar con instrumentos orgánicos, como un balde y sillas, en las calles de Las Vegas (EEUU), junto a su esposo Alberto Pérez.

Linica y Kraken, como se conocen artísticamente, experimentaron la pasión de hacer lo que más les gusta desde un escenario distinto, dejando a un lado la vergüenza y abriendo paso a la osadía de convertir un reto difícil, en uno de los momentos más enriquecedores en sus vidas.

Desde ese entonces, Linica, que esperaba su primera hija, hizo de las calles de Las Vegas, la tarima para mostrar su talento y obtener ingresos junto a su esposo quien además es músico de su agrupación y el productor musical de Lina.

Hasta los últimos días de su embarazo, la artista de Aguachica, Cesar, estuvo llevando los sonidos caribeños y tropicales que interpreta a uno de los lugares más transitados en Estados Unidos. Los dolores de parto los tuvo en las calles y fue en Las Vegas, donde nació Luna del Mar.

A sus 27 años, Lina Rodríguez, es artista y mamá de tres hijos: Luna del Mar, Adam y Salvador Ángel. Este último nació en medio de la pandemia, le tocó 'parir con tapabocas'; al segundo lo trajo al mundo de la misma forma que a Luna, en las calles de Estados Unidos, tocando y cantando.

'La experiencia de tocar en las calles ha sido algo muy enriquecedor, toqué embarazada hasta el último momento en las calles de Las Vegas cuando iba a tener mi primera hija, Luna, toqué con dolores de parto afuera de un casino con instrumentos orgánicos como sillas, las hojas del piso y uno que otro que llevábamos nosotros con los que interpretábamos estos sonidos caribeños. También pasó exactamente lo mismo con mi hijo Adam, fuimos a tocar en las calles del Subway de Nueva York con muchísimo frío y me dieron los dolores, entonces eso lo hizo algo complicado, pero no dejo de pensar que fue una de las experiencias más grandes y divinas que he vivido', indicó la costeña.