La madrugada del 5 de noviembre de 1983 dejó en evidencia un principio fundamental de la física del buceo que, para siempre, quedaría grabado en la memoria de los buceadores alrededor del mundo: la presión.
La tragedia ocurrió en la década de los 80 en una plataforma de exploración petrolera en el Mar del Norte. Cinco personas fallecieron.
La madrugada del 5 de noviembre de 1983 dejó en evidencia un principio fundamental de la física del buceo que, para siempre, quedaría grabado en la memoria de los buceadores alrededor del mundo: la presión.