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Si su bebé tiene seis meses, ya se habrá dado cuenta que esta es una etapa de cambios —la incorporación de comidas, los primeros dientes, la adquisición de nuevas habilidades y balbuceos definidos—. Esta es también la edad a partir de la cual su pequeño es más propenso a adquirir enfermedades virales.

Un incremento de las precipitaciones en gran parte del territorio nacional durante octubre y noviembre fue advertido por el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales de Colombia (Ideam). A raíz de este pronóstico, expertos recomiendan prestar especial atención al cuidado de la salud respiratoria de los bebés, en particular de los que nacen prematuros.

La pediatra Cristina del Carmen Muñoz explica que en el mes seis desaparecen los anticuerpos que la madre le transfirió al niño vía transplacentaria y que este, cuando sufre infecciones virales, como la gripa y el resfriado común, empieza a desarrollar sus propias inmunoglobulinas —proteínas producidas por el sistema inmunológico para atacar a los antígenos, como las bacterias, los virus y los alérgenos—.

El sistema inmune del recién nacido 'apenas está en formación'; sus órganos (como ganglios y bazo) no están bien organizados y algunas de sus células no tienen todos los receptores que se necesitan para responder de forma adecuada contra los microorganismos patógenos.

En el caso de los bebés prematuros, el doctor José María Solano, presidente de la Asociación Colombiana de Neonatología, dice que esta situación se debe a que los bebés pretérmino tienen un sistema inmune más inmaduro al del resto de recién nacidos, 'durante la gestación, los bebés prematuros no alcanzan a desarrollar sus órganos por completo, lo cual debilita sus defensas ante la propagación de cualquier enfermedad'.

Virus respiratorio

El inicio de la temporada invernal de fin de año implica un aumento de la propagación y circulación del virus sincitial respiratorio (VSR), que ocupó el 52,1% de las infecciones por virus respiratorios, según el último boletín epidemiológico de 2015, publicado por el Instituto Nacional de Salud.

Los pacientes con VSR presentan síntomas similares a los de un resfriado: fiebre, secreciones nasales y tos, y, de forma agravada, podría causar neumonía y dificultad para respirar —síntomas que podrían llevar al deceso a un bebé prematuro—.

Los virus respiratorios se transmiten fácilmente de una persona a otra. 'Estos se propagan a través de las partículas diminutas que quedan en el aire después que una persona enferma se suena la nariz, tose o estornuda', afirma Solano.

Aunque actualmente no existe un tratamiento específico para el virus sincitial respiratorio, se recomienda epidemiológicamente en bebés prematuros la prevención y el cuidado de los padres. Para Solano, 'la utilización de anticuerpos y los cuidados sanitarios son fundamentales para prevenir el VSR en bebés prematuros. Sin embargo, la clave está en cumplir al pie de la letra las indicaciones del médico tratante'.

Tipos de enfermedades respiratorias

Las enfermedades respiratorias pueden ser altas y bajas, manifiesta Muñoz. Dentro de las altas se encuentran la rinofaringitis, faringitis, otitis y sinusitis, 'que son infecciones de las fosas nasales, de los oídos, de los senos paranasales, de la garganta y de la laringe'. Las infecciones de vías bajas incluyen la bronquitis aguda y bronquiolitis, la gripe y la neumonía. Estas últimas son una de las principales causas de enfermedad y muerte de niños y adultos en el mundo, según la Fundación Europea del Pulmón (ELF, por sus siglas en inglés).

Se clasifican de esa manera, porque las primeras afectan los órganos que van desde la nariz hacia arriba y las segundas a los que se ubican desde la nariz hacia abajo.

La pediatra señala que la epidemia 'grande a nivel hospitalario', en este momento, es la bronquiolitis, que afecta en mayor medida a los menores de dos años. 'Se caracteriza por un cuadro de rinofaringitis, y a las 48 horas los niños empiezan a tener dificultad para respirar, esta se presenta como un ruido, que se llama sibilante, y el niño tiene dificultad para expulsar el aire'.

Fiebre, dolor de cabeza y malestar general, secreción o congestión nasal y tos seca son los síntomas básicos de la rinofaringitis, que suele tener un comienzo brusco.

'Los bronquiolos son las pequeñas vías aéreas en que se dividen los bronquios llegando a los alvéolos pulmonares', explica Muñoz.

Recomendaciones

Para inmunizar a los bebés contra estas infecciones, los expertos hacen las siguientes recomendaciones:

Mantener un correcto y exhaustivo lavado de manos antes de tener contacto físico con el bebé.

También sugieren fomentar la lactancia materna, ya que a través de la leche de la madre se logran transmitir algunos de los anticuerpos necesarios para subir las defensas de los bebés.

Indican que es necesario evitar que algún miembro de la familia fume dentro del hogar del bebé. Además eludir que los padres lleven a los bebés a lugares concurridos, donde se encuentran muchas personas. En general, debe estar aislado de grandes grupos de personas.

En lo posible se recomienda restringir las visitas durante los primeros tres o 4 cuatro meses de vida.

Si alguien de la familia presenta síntomas de resfriado, se sugiere usar tapabocas y cambiarlo cada 3 o 4 horas.