Buenos Aires. ‘Gabo’, su nombre, es su mejor carta de presentación. Es el gancho que atrae a los colombianos residentes en Buenos Aires, pero también a brasileros, venezolanos, argentinos, y hasta europeos, que esperan encontrarse de golpe con algo del costumbrismo de las creaciones literarias del Nobel en la gastronomía que ofrecen.
“Apenas la gente escucha o lee ‘Gabo’ se imagina a Colombia, comida del Caribe, él es uno de los mejores exponentes de nuestro país en el Mundo. Por eso, los dueños- la familia Gracia Zapata, provenientes del Valle del Cauca- decidieron que el restaurante-bar sería una gran representación de la cocina colombiana, inexistente hasta hace 5 años en Buenos Aires”, cuenta Sandra Matíz, administradora desde hace 3 años del restaurante ubicado en la calle Honduras 5719, en Palermo Hollywood.
Fotos por todos lados de Cartagena, de Cali, de Bogotá atraen las miradas de los visitantes. Una pantalla de más de 32 pulgadas que todo el tiempo transmite la señal del canal Caracol, la música de fondo en la que saltan entre canción y canción de un ritmo a otro, sumado una hamaca que cuelga de pared a pared, detrás suyo una acordeón Honer, un sombrero vueltiao, y la bandera de Colombia componen la ambientación del pequeño, pero acogedor restaurante.
Por eso es el lugar favorito de los futbolistas colombianos que trabajan en Argentina. Justamente, el pasado jueves estuvieron almorzando juntos Teofilo Gutiérrez, Falcao García, El Tigre Castillo, e Iván Vélez, entre otros.
Y aunque en el menú no están representados ni personajes ni títulos de obras de García Márquez, los comensales no se equivocan, pues con los 36 platos del menú se abarca ampliamente las preparaciones principales de las cinco regiones del país, pero con un valor agregado: su presentación.
“Buscamos que nuestros clientes conozcan la cocina colombiana de una manera más elegante, y no se lleven esa idea del típico ‘corrientazo’. Por eso, además de que la preparación sepa muy bien, nos preocupamos por la estética”. Todo con el fin de poder competir con el posicionamiento en la capital argentina que tienen otras gastronomías latinoamericanas, como la peruana.
“Antes la comida peruana no tenía tanto renombre como lo tiene ahora, y eso ha sido gracias a la presentación e innovación en sus platos. Justamente eso es lo que buscamos en Gabo”, asegura Andrés Moreno, cocinero.
Los fríjoles reinan. El plato más solicitado en este restaurante es la bandeja paisa, que solo es desplazada los domingos por el sancocho. Sus precios oscilan entre los 30 y 50 pesos argentinos (unos 15 mil y 25 mil pesos colombianos), lo que los hace asequibles. Además, sus jugos de frutas como la guanábana, mango y otras como el melón, son muy apetecidos, pues en este país no se venden. Y ellos sí logran ofrecerlos gracias a un empresario colombiano que las importa, al igual que otros productos típicos necesarios para las preparaciones.
Su otro valor agregado es que es atendido cien por ciento por colombianos, de los cuales la mayoría son del Valle del Cauca, y ninguno es de la Costa.
Cómo surgió. La pareja de colombianos conformada por Alejandro Gracia y su esposa, llegaron a Argentina hace 5 años y no encontraron un restaurante en el que pudieran degustar la comida típica de nuestro país, y en el que sintieran como en casa. Por eso decidieron abrir Gabo, que ha logrado posicionarse como uno de los mejores de la capital al ser incluido en las guías gastronómicas de Argentina. Y sobre todo, como lugar de encuentro y fiestas de los colombianos residentes acá.
Por Ankar Brito Lozada
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